Nunca antes había sucedido esto: “Ofrezco disculpas a los que se sintieron ofendidos por mi comportamiento ante Portugal”. Así fue como abrió Juan Carlos Osorio una muy fría conferencia de prensa, tan esperada y tan lejana de sustancia.

“Seguiré con las rotaciones”, dijo el estratega por lo que la Copa Oro se pondrá divertida y será como si viéramos un equipo de la secundaria en el que todos tienen que jugar para que no se frustren los niños y no se enojen los papás.

Por primera vez desde que tomó a la Selección Nacional no habló de nombres de jugadores de su rival, El Salvador, ni de esquema táctico. No fue tan profundo como otras ocasiones.

Arrepentido, Osorio, en conferencia de prensa exprés, salió a pedir perdón por su manera de actuar en el certamen de Rusia.

“Asumo la responsabilidad y respeto las decisiones que se tomen”, abundó el colombiano, al referirse a la posibilidad de emprender un proceso para reducir su castigo.

Ayer por la mañana, Decio de María, presidente de la Federación Mexicana de Futbol, salió a defender la gestión del actual entrenador del Tricolor. El mandamás del balompié nacional argumentó que ya sabían que el método de trabajo que se iba a emplear en el combinado.

Osorio salió a agradecer el respaldo, ante los cuestionamientos de la prensa: “Siento mucha gratitud con la Federación porque me sigue considerando como el encargado de esta gestión y de trabajar y continuar dirigiendo al equipo”. Soy responsable del buen ejemplo que debo dar, lo asumo; no volverá a acontecer”.