México no está muy lejos de su punto más alto de inflación, dijo este viernes el gobernador del Banco de México (Banxico), Agustín Carstens.
En junio, la inflación interanual de México se aceleró hasta 6.31 por ciento, su mayor nivel en ocho años y medio.
Sobre los recientes incrementos a la tasa de interés clave que la entidad monetaria ha aplicado para mantener a raya el alza sostenida de los precios, Carstens dijo que “la política monetaria tiene un efecto rezagado sobre la inflación”.
Carstens habló en un evento conjunto con el presidente de la Reserva Federal de Dallas, Robert Kaplan, en la Ciudad de México.
El jueves, el gobernador del Banco Central dijo en entrevista con Reuters que estaba decepcionado de dejar el cargo con una inflación alta.
“Por supuesto que me habría encantado tener dentro de los registros de mi periodo que hubiésemos consolidado el objetivo de 3 por ciento”, dijo el funcionario, que ha liderado el Banxico por ocho años.
Sin embargo, agregó que la liberación de los precios de las gasolinas podría ser positiva para la economía a largo plazo.
En su más reciente decisión de política monetaria, el Banco de México aumentó la tasa referencial en 25 puntos base a un 7 por ciento.
De cara al proceso electoral de 2018 para la presidencia del país, el banquero advirtió la importancia de no perder el ritmo de abatimiento de la inflación y destacó que el actuar del Banco Central se mantiene al margen de procesos políticos.
“El hecho de que el banco sea una institución autónoma con un mandato constitucional, hace que nuestra acción sea independiente del ciclo político, trasciende períodos electorales y esto da certidumbre”, apuntó.