La crisis española por la iniciativa independentista de grupos barceloneses no se reduce a la violación de la ley sino a hechos históricos que reviven dos de las heridas abiertas en España: la instauración de la república en 1931 y la guerra civil franquista 1936-1939.
Otros datos ayudar a explicar la profundidad de la crisis y las razones por las cuales los toletes del Partido Popular (Ex Alianza Popular de Franco), apoyado por el Partido Socialista Obrero Español (monárquico), no van a resolver y sí contribuyeron a fermentar más el espíritu secesionista-republicano:
1.- El rey Felipe VI viene de la Casa de los Borbones, por cierto, la que también produjo a Louis XIV de Francia, el que dicen que dijo “el Estado soy yo”.
2.- La realeza española ha sido históricamente autoritaria, desde su fundación en 1469. Luego de ser liberado, Fernando VII en 1814 retomó la corona, pero se encontró con la Constitución de Cádiz que acotaba los poderes del rey. Fernando VII la abrogó, reinstaló el absolutismo de 1814 a 1820, presionado por un golpe de Estado volvió a reconocer la Constitución para el famoso trienio liberal y en 1823 de nueva cuenta optó por el absolutismo y gobernó la famosa “década ominosa” de abusos de poder hasta su muerte.
3.- España vivió sin monarquía directa de 1931 en que la república por la vía electoral desplazó al rey Alfonso XIII hasta que Franco restauró la monarquía y le heredó el poder en 1975 al rey Juan Carlos I, después de que el monarca juró respetar las leyes franquistas. Pero de 1931 a 1975 los españoles vivieron la dictadura de Franco y una monarquía franquista. De 1975 a 2014 en que abdicó a favor de su hijo, Juan Carlos I tuvo más escándalos y abusos que una imagen de austeridad.
4.- Barcelona está muy cerca de los Borbón: el padre de Juan Carlos I, don Juan, tenía el título de Conde de Barcelona que hoy, por cierto, ostenta el rey Felipe VI. Don Juan se negó a ser el rey bajo la autoridad de Franco, en tanto que Juan Carlos I rompió con su padre en 1966 cuando se negó a asistir a una ceremonia de recordatorio de Alfonso XIII porque su presencia reconocería la sucesión dinástica de su padre; en premio Franco designó a Juan Carlos en 1969 príncipe a título de rey, pasando por las reglas monárquicas porque el verdadero sucesor era don Juan. Pero el reino de España había nacido del golpe de Estado de Isabel para hacerse de la corona de Castilla.
5.- La transición española se consolidó por la decisión de Juan Carlos I, Alianza Popular (hoy PP), el PSOE y el Partido Comunista de mandar el franquismo al olvido, a pesar de las represiones, asesinatos y abusos de poder. De haber ajustado cuentas con el franquismo, el papel clave de Juan Carlos en la legitimación de la dictadura le hubiera restado autoridad moral.
6.- La guerra civil española, el pasado rebelde de Cataluña y sobre todo Barcelona, la definición republicana de los independentistas catalanes y el papel de Barcelona y los borbones ha invadido loa palacios de La Zarzuela (de los reyes) y El Pardo (sede de Franco).
Nota: artistas de todo el mundo grabaron la canción “Déjame abrazarte México” dedicada a los héroes anónimos de los terremotos; se puede escuchar en: https://youtu.be/pz9PJUfsr5s, por cortesía del tenor José Luis Duval. Es conmovedora y solidaria.
Política para dummies: La política es el retorno de los fantasmas del pasado porque los fantasmas nunca mueren.
Sólo para sus ojos:
- Por cualquier lado, el PAN ya perdió puntos electorales por las maniobras de Ricardo Anaya como presidente del partido y auto designado candidato presidencial del PAN y sus aliados PRD y MC. Al interior del partido ha perdido seguidores. No importa si con Margarita Zavala de Calderón se salen muchos o pocos panistas; el daño consiste en una mala imagen pública de Anaya que contará mucho en las elecciones presidenciales.
- Entre panistas y perredistas hay preocupación por los perfiles autoritarios y hasta necios de Anayacon los que no están de acuerdo con él. Sobre todo, porque ha dado la imagen de un dictador.
- Mal manejo de estrategia de comunicación de los funcionarios que revisan el tratado comercial con los EE.UU. y Canadá porque carecen de una estrategia de negociación. Ahora resulta que si desaparece el Tratado no va a pasar nada, cuando hasta hace poco decían que el tratado era todo.