El Consejo Político Nacional del PRI avaló el método de la convención de delegados para elegir a su candidato a la Presidencia de la República en los comicios de 2018.
En votación económica, los consejeros priistas avalaron la propuesta presentada por la dirigencia nacional para que el abanderado presidencial sea definido por una convención de representantes del priismo de todo el país.
Se autorizó al Comité Ejecutivo Nacional (CEN) emitir la convocatoria para elegir al candidato presidencial después de que el método sea ratificado por la mayoría de los consejeros políticos estatales.
“Dimos ya el banderazo de salida, el método aprobado es la convención de delegados, es un mecanismo que el PRI ha utilizado con éxito en el pasado reciente, nos ha dado importantes triunfos electorales en unidad, así lo hicimos en el Estado de México, por esa vía resultó electo quien es hoy gobernador de esa importante entidad, Alfredo del Mazo”, destacó el dirigente nacional Enrique Ochoa Reza.
Los consejeros políticos priistas también avalaron los métodos de selección de los candidatos a diputados federales y senadores por mayoría relativa, los cuales 50 por ciento serán definidos por convención de delegados y 50 por ciento por Comisión para la Postulación.
“El PRI ha defindo el método de selección de candidaturas para diputaciones, senadurías y Presidencia de México, y vamos a ganar las tres”, afirmó.
Ochoa Reza destacó que este año el PRI conquistó importantes triunfos con el Estado de México y Coahuila, donde todavía está pendiente la confirmación del Tribunal Electoral del Poder Judicial de la Federación, pero indicó que no es momento de triunfalismos.
“El PRI está en la inercia ganadora, pero no es momento de triunfalismos, es momento de redoblar el paso, el tamaño del reto exige lo mejor de nosotros mismos, vamos por el debate por lo mejor de la nación”, afirmó.
Indicó que está preparados para enfrentarse al Frente Ciudadano por México “sin pies ni cabeza” que tiene su merecido cuarto lugar en las encuestas y Andrés Manuel López Obrador, que se quedó atorado en el pasado.
