Australia se convirtió este miércoles en la selección número 31 en clasificarse para el Mundial de Rusia 2018, al derrotar en su casa 3-1 a una deslucida selección de Honduras, en la revancha de la repesca intercontinental entre el representante de Asia y de la Concacaf.

El capitán australiano, Mile Jedinak, acabó con las ilusiones hondureñas con un “hat-trick” conseguido con un gol de tiro libre y dos de penal. Alberth Elis puso el descuento en las postrimerías del juego.

El comienzo del partido se manejó en el centro del campo con pocas llegadas de ambos equipos, tratando de acomodarse en el terreno de juego. En el avance del juego fue la selección local la que intentó abrir el marcador aprovechando su velocidad y su juego aéreo, pero los catrachos se mostraban bien en defensa.

A los 15 minutos, el centrocampista Aaron Mooy se aproximó con la primera jugada de peligro, a través de un tiro libre que fue bien controlado por el portero Donis Escober. Tres minutos después, el capitán de Honduras Maynor Figueroafue amonestado con tarjeta amarilla luego de cometer una falta innecesaria contra Tim Cahill, porque estaba lejos de su área.

El trascurso del partido no fue nada emocionante ya que los dos equipos buscaban con pelotazos aprovechar la velocidad por las bandas y llegar al área a través de centro, pero sin peligro. Tim Cahill, al 36’, se quitó al defensa Bryan Beckelesen la banda izquierda y dio un pase espectacular para Azis Behich que disparó cruzado, pero Escober de nuevo evitó el gol.

El embate de los “socceroos” se hacía sentir en casa, más con el apoyo de su afición que gritaba sin descanso, exigiendo la apertura en el marcador. Cinco minutos antes de finalizar la primera parte, el defensa Emilio Izaguirre se lesionó, solicitó cambio y en su lugar ingresó Henry Figueroa.

El árbitro argentino Néstor Pitana, dio por concluido el primer tiempo con un 0-0. Para la parte de complemento los dos conjuntos salieron con los mismos hombres. Los locales desde el comienzo trataron de realizar jugadas individuales para incursionar en el área catracha, especialmente por medio del habilidoso Tom Rogie.

En una de esas jugadas, Rogie recibió falta cerca del área contraria. El tiro libre fue realizado por Mile Jedinak, cuyo remate fue desviado por Henry Figueroa, con tan mala suerte que la pelota se fue al fondo de la portería y nada pudo hacer el arquero Escober.

Con el 1-0 en contra, el estratega catracho Jorge Luis Pintohizo ingresar al mediocampista Mario Martínez en sustitución de Henry Figueroa y dos minutos después también envió al campo a Eddie Hernández por un desaparecido Romell Quioto.

A falta de 15 minutos para el final del partido, el director técnico australiano, Ange Postecoglou, también modificó su plantel y envió a la cancha a Robbie Kruse en lugar de Tom Rogie. La catástrofe llegó para la selección de Honduras al minuto 72, cuando Bryan Acosta tocó la pelota con la mano dentro del área y el árbitro no dudó en decretar el penal en favor de los australianos que fue convertido en gol por Mile Jedinak para el 2-0.

El segundo tanto evidentemente descontroló a los hondureños que se fueron al frente en busca del descuento, para tratar de meterse de nuevo al partido, algo que nunca llegó. Los espacios dejados por los centroamericanos fueron aprovechados por los “socceroos”. En una incursión al área de Robbie Kruse, Johnny Palacios le cometió falta y el árbitro volvió a decretar un penal al 72’, que nuevamente fue ejecutado por Jedinak para conseguir el 3-0.

Sin nada más que hacer, los catrachos siguieron realizando su juego y tuvieron la única oportunidad de anotar al minuto 93, en tiempo de descuento. Alberth Elis se encargó de mandarla al fondo y 30 segundos después se pitó el final del juego.

Australia avanza a su cuarto Mundial de forma consecutiva, mientras que Honduras se tendrá que conformar con ver la competencia desde casa.