El ataque de un suicida con bomba dejó al menos 50 muertos este martes en una mezquita en el noreste de Nigeria, en la peor matanza del año en una región golpeada por la insurgencia del grupo militante islamista Boko Haram.
Abubakar Othman, portavoz policial del estado de Adamawa, dijo que la cifra de muertos en la localidad de Mubi ya alcanzaba las 50 personas, “pero podría seguir creciendo porque hay muchos heridos graves”.
Boko Haram comenzó a controlar partes del territorio en Adamawa. El grupo suele llevar adelante ataques suicidas en lugares públicos como mezquitas y mercados.
“Algunos de los cuerpos estaban tan despedazados que era imposible hacer un reconocimiento”, dijo Bayi Muhammad, un fiel que estaba en la mezquita de Mubi que dijo que se salvó de la explosión porque llegó tarde a las oraciones de la mañana.
Boko Haram lleva adelante ataques en el noreste de Nigeria desde 2009 en su intento por instaurar un estado islamista en la región. Su campaña insurgente ha dejado más de 20 mil muertos y ha forzado a unas 2 millones de personas a abandonar sus hogares.
El Gobierno y el Ejército de Nigeria han dicho en numerosas oportunidades desde 2015 que Boko Haram está casi derrotado, pero el grupo sigue realizando ataques contra objetivos civiles y militares.
La explosión de este martes llevó a 278 las víctimas en lo que va de este año en el país, de acuerdo a cálculos de Reuters. Ningún grupo se adjudicó el hecho.
