Un presentador de televisión tomó la delantera sorpresivamente en las elecciones presidenciales de Honduras, según los resultados oficiales parciales del este lunes, desafiando los pronósticos que auguraban una victoria del actual mandatario del país centroamericano.
Con el 57 por ciento de las urnas escrutadas, el opositor Salvador Nasralla superaba por casi cinco puntos porcentuales al presidente Juan Orlando Hernández, según los primeros resultados oficiales divulgados por el Tribunal Supremo Electoral (TSE) casi 10 horas después del final de la votación del domingo.
“¡Gracias Honduras! Unidos @EnAlianza lo hemos logrado. Soy el nuevo Presidente electo de #Honduras”, escribió Nasralla, de 64 años, en su cuenta de Twitter, tras conocerse los resultados.
Horas antes de anuncio del árbitro electoral, los dos candidatos se habían autoproclamado vencedores.
Aunque se espera que más tarde que el TSE difunda nuevas cifras, el candidato opositor llamó a sus seguidores a marchar hasta la sede del árbitro electoral en un aparente esfuerzo por presionar a las autoridades par que divulguen el resultado final.
Nasralla, quien lidera una amplia coalición que aglutina corrientes conservadoras y de izquierda llamada Alianza de Oposición Contra la Dictadura, obtenía un 45.17 por ciento de los votos frente al 40.21 por ciento de Hernández, que había llegado como favorito en las encuestas para ganar con comodidad.
Como Hernández aún no concede la derrota, un resultado cerrado podría generar tensiones en el empobrecido país de América Central, que también sufre por una brutal violencia.
Después de que la autoridad electoral hiciera su primer anuncio, Hernández reiteró en una breve declaración que había ganado e instó a sus seguidores a esperar a que lleguen nuevas cifras de las áreas rurales, donde goza de mayor apoyo.
“Ni socialista ni comunista”
El candidato que llegó en tercer lugar en la contienda electoral, Luis Zelaya, dijo el lunes que Nasralla era el nuevo líder del país e instó a Hernández a aceptar la derrota.
El mandatario de 49 años ha logrado reducir una tasa de asesinatos altísima, acelerar el crecimiento económico y reducir el déficit desde que asumió el cargo en 2014, pero también ha sido acusado de estar acumulando cada vez más poder.
Washington ve a Hernández como un aliado confiable en la lucha contra el tráfico de drogas y las pandillas, así como para controlar el flujo de inmigrantes hacia Estados Unidos. Una victoria para el recién llegado Nasralla llevaría a los Estados Unidos a un territorio desconocido.
“Ahora puede respaldar sus posiciones anticorrupción. O no”, dijo un funcionario estadounidense, y agregó que el gobierno de Estados Unidos espera trabajar “cooperativamente de varias maneras” con Nasralla.
El político se describe a sí mismo como de centro y ha dicho que espera desalentar la migración masiva de hondureños hacia Estados Unidos, impulsando el empleo local.
“Yo no soy socialista ni soy comunista. Yo me defino como una persona de centro porque tomo todo lo mejor de la ideología socialista, pero no los extremos. Y tomo todo lo mejor de la derecha, por ejemplo la libre empresa, el libre mercado”, dijo en una entrevista antes de las elecciones de domingo.
Muchos creen que el coordinador de la coalición, el expresidente Manuel Zelaya -derrocado en 2009 en medio de las preocupaciones de que planeaba adoptar políticas socialistas en Honduras- es la verdadera fuerza detrás de Nasralla.
“Ganamos…”, escribió Zelaya en su cuenta de Twitter, agradeciendo al pueblo hondureño. “Viene la democracia y la justicia para el pueblo de HONDURAS”, agregó el lunes por la madrugada.
El funcionario estadounidense dijo que no creía que Hernández pudiera alcanzar a Nasralla en el conteo de los votos que faltan. “Esto podría prolongarse durante semanas”, dijo.
Nasralla, que ha prometido luchar contra la corrupción, aseguró antes de los comicios: “Vamos a tener unas buenas relaciones con los Estados Unidos y con todos los países”.