Space Exploration Technologies, de Elon Musk, realizará su próxima misión desde el complejo de Florida dañado en una explosión en septiembre de 2016 que involucró a uno de sus cohetes, lo cual indica que la planta vuelve a operar y allana el camino a un ritmo más acelerado de lanzamientos.
Está previsto que la plataforma de la Estación de la Fuerza Aérea en Cabo Cañaveral, que había estado fuera de servicio desde que un cohete Falcon 9 de SpaceX explotó ahí hace 15 meses, reanude sus lanzamientos el 12 de diciembre con una misión de reabastecimiento de la Estación Espacial Internacional CRS-13 para la NASA.
SpaceX concluyó el miércoles un ensayo estático de incendio para la misión en la plataforma reparada y volverá a utilizarla a comienzos de enero para su misión secreta Zuma, dijo la compañía en un tuit.
Mientras el Space Launch Complex 40 estaba en reparaciones, SpaceX trasladó los lanzamientos del Falcon 9 a la histórica plataforma 39A del Centro Espacial Kennedy de la NASA en Florida, desde donde partió Neil Armstrong para posarse en la Luna en 1969.
Ahora que la plataforma está reparada, SpaceX puede volver a lanzar ahí su Falcon 9 más pequeño mientras prepara la Plataforma 39A para el próximo vuelo de bautismo de su cohete Falcon Heavy más grande. SpaceX también utiliza un puesto de lanzamiento en la Base Vandenberg de la Fuerza Aérea en California.
La compañía, con sede en Hawthorne, California, ya realizó 16 misiones en 2017, el doble que en 2016. CRS-13 usará tanto un propulsor de cohetes que ya voló anteriormente como una nave espacial reutilizada, explicó la empresa en otro tuit.