Dos policías de Ohio murieron baleados este sábado al ingresar a una casa en un suburbio de Columbus para atender una emergencia reportada al 911.
El jefe de la policía de Westerville, Joe Morbitzer, dijo que Eric Joering, de 39 años, falleció en el lugar, y su compañero Anthony Morelli, de 54, murió en un hospital local.
Según Morbitzer, los agentes acudieron a atender un “posible incidente familiar”. Un vecino que escuchó los disparos dijo que ocurrieron en una vivienda cuyos ocupantes “siempre están discutiendo y peleando”.
“Los agentes dieron sus vidas por defender las de otros”, afirmó Morbitzer durante una conferencia de prensa en que mostró dificultades para controlar sus emociones. Describió a los fallecidos como “verdaderos héroes estadounidenses”.
Un sospechoso, que ya fue atendido, fue herido y atendido en un hospital, agregó la policía sin dar más detalles.
El Departamento de Policía de Columbus investiga el tiroteo.
El gobernador republicano John Kasich, que vive con su familia en un pueblo cercano, tuiteó que estaba “muy triste de enterarse de las muertes de dos agentes de mi localidad de residencia”. Pidió a los habitantes de Ohio que se le unan para “levantar en oración a las familias de estos agentes”.
Joering tenía 16 años de servicio en la policía y Morelli 30.
“Ambos eran de lo mejor con que contamos”, dijo Morbitzer. “Esta era su vocación”.
Agregó que “los dos dieron su vida para la proteger a otros, para eso vivían y respiraban”.
Trea Horne, de 17 años, dijo a The Associated Press que se encontraba en el piso superior de la casa que comparte con su madre, cuando escuchó cinco o seis disparos el sábado por la tarde.