El candidato presidencial por la coalición Por México al Frente afirmó que fue legal la compra venta de una nave industrial por la que se acusa de lavado de dinero. En un video de más de ocho minutos subido a YouTube Anaya Cortés asegura que nada tiene que ver con los recursos que se usaron para comprarle dicha nave pues eso no es responsabilidad de quien vende sino de quien compra.
Explicó de forma detallada y apoyado en imágenes que en mayo de 2014 compró un lote baldío a través de su empresa (Juniserra)y no se lo compró a una persona física sino directamente al parque industrial cuya razón social es Developmetl, el mismo parque industrial que alberga a empresas como Nike, Alestra, TLW, sin intermediarios.
Añadió que luego de la compra, “a lo largo de dos años construimos una nave industrial que quedó terminada en mayo de 2016 con más de 7 mil metros techados.
Explicó que el dinero provino de tres Fuentes principales: “hipotequé mi casa obteniendo un crédito en Banamex, se contrató un crédito para el terreno en el propio parque industrial y de los ahorros que teníamos nosotros en lo personal como en la propia empresa”.
Sobre el precio de compra del terreno, dijo que lo compró “a precio de mercado, a 67 dólares el metro cuadrado y de hecho hoy, cuatro años después se pueden buscar terrenos en el mismo parque industrial donde venden a 76 dólares el metro cuadrado, es decir yo compré a lo que valen los terrenos en esa zona”.
Anaya Cortes apuntó que “contrario a lo que dicen los del PRI que se infló el precio, el precio de venta fue de 54 millones, es decir, el costo del terreno más la bodega industrial”.
Señaló que incluso hoy en internet una bodega con extensión de la mitad de lo que él vendió, está en 35 millones de pesos, por lo que “está clarísimo que es falso que se haya inflado la compra venta”.
Insistió que la bodega se la vendió a Manhattan Master Plan y su accionista principal es Juan Carlos Reyes, arquitecto muy conocido en Querétaro y le pagó la bodega con tres transferencias bancarias.
Abundó que con ese dinero pagó la deuda del terreno e impuestos, y decidió comprar otro terreno ubicado en el mismo parque industrial para probablemente volver a construir con la misma empresa que a esto se dedica.
Sobre los cuestionamientos sobre el origen del dinero con el que se le compró la nave industrial, el candidato presidencial indicó que por obvias razones no lo puede saber pues “cuando se vende un terreno, un coche o una casa no podemos saber de donde obtiene el dinero quien nos está comprando”.
“En mi caso en la cláusula 20 de la escritura quien me compró declaró bajo protesta de decir verdad que los recursos tienen una naturaleza lícita lo cual como lo dice la misma cláusula deja a salvo a la parte vendedora, en caso de cualquier infracción”.
Insistió que todo lo que ha salido en su contra son puras mentiras del PRI porque tienen miedo y están desesperados de perder la elección.