El futuro de las reformas en Cuba, la unificación monetaria y los cambios a la constitución fueron los temas básicos tratados en la última reunión del Comité Central del Partido Comunista de Cuba, en la que trascendieron “los resultados desfavorables” en la aplicación de las transformaciones económicas impulsadas por Raúl Castro desde 2011.
Toda la prensa oficial dio cuenta hoy que “durante dos intensos días de trabajo” se evaluaron “las políticas implementadas”. La reunión de la máxima dirección colegiada del partido único se realizó a 23 días de que el parlamento elija a un nuevo presidente del país.
La nota oficial, la misma en todos los medios, señaló que “los primeros tres años se caracterizaron por un alto ritmo de implementación de políticas (económicas), el cual se redujo luego por la complejidad de las medidas y también a causa de errores en la planificación de los procesos y en su control”.
Asimismo se criticó la “visión limitada sobre los niveles de riesgos e incompleta apreciación de los costos y beneficios” de una reforma que potencia los sectores privados y cooperativos junto con las mayoritarias empresas estatales y que tiene como objetivo “propiciar el despegue de la economía nacional”.
Sin embargo, en los últimos dos años la economía cubana entró en recesión en 2016 (el PIB disminuyó un 0.9 por ciento) y creció en 2017 solo un 1.6 por ciento.
En tanto, desde agosto pasado se congeló el otorgamiento de licencias para el trabajo privado en varios sectores. Días antes de este cierre, que aún continúa, el parlamento unicameral había analizado el tema difundiéndose criterios sobre “las ilegalidades” que propician esas formas de producción.
En la reunión del Comité Central se informó que “ya han sido firmadas las normas jurídicas de mayor rango y debe desplegarse a continuación un proceso de capacitación que incluirá a los 580 mil trabajadores por cuenta propia (privados) y a más de 30 mil funcionarios públicos”.
Sobre la unificación monetaria, una de las mayores demandas de la población, solo se dijo que el tema se encuentra entre las prioridades. En Cuba circulan dos monedas: el peso cubano, en el que se cobran los salarios en el sector estatal, y el peso cubano convertible, especie de divisa fuerte que solo circula en el país y que vale 24 veces más que el primero.
También se informó que en los últimos tiempos se “vienen realizando estudios para una futura reforma de la Constitución, que deberá reflejar las principales transformaciones económicas, políticas y sociales” en el país, “al tiempo que ratificará el carácter irrevocable de nuestro socialismo y el papel dirigente del Partido en la sociedad cubana”.