El presidente de Venezuela, Nicolás Maduro, denunció que hay un plan internacional para sabotear las elecciones presidenciales del 20 de mayo.
El mandatario señaló que en los próximos días va a mostrar pruebas contundentes, además de que tiene la forma de destruir ese plan, de acabar con ese plan y esa fórmula sagrada, milagrosa, única, invencible que se llama la consciencia del pueblo venezolano.
Maduro también proclamó además el fracaso “total” de la VIII Cumbre de las Américas celebrada en Perú, en la que la crisis venezolana fue el tema principal de debate.
“Todo el que se mete con Venezuela se seca, pretendieron excluirnos de la cumbre y lo que hicieron fue fracasar. La cumbre ha sido un fracaso total”, afirmó Maduro al término de una marcha contra el imperialismo.
Señaló que en la Cumbre de Lima sólo hubo discursos huecos de algunos presidentes sin pueblo y “sicarios antipopulares, de rodilla al imperialismo”.
“Uno ve a un (presidente Mauricio) Macri, a un presidente no elegido Michel Temer, de Brasil, y a un Juan Manuel Santos, de Colombia, hablar de Venezuela y verdaderamente da vergüenza, pena”, aseguró.
“Por eso felicito a los cientos de personas que se lanzaron a las calles otra vez, a decir: aquí estamos juntos, como siempre, aquí estamos los valientes, los patriotas”, dijo a los participantes en la concentración para respaldar la soberanía de la nación.
Al pedir apoyo de sus seguidores para las elecciones del 20 de mayo, cuando buscará su reelección en el cargo, dijo sentirse un presidente popular.
“Yo me siento un presidente pueblo, lleno de amor por ustedes. Me siento un presidente amado, curtido en la lucha en todos los años que nos ha tocado, en la batalla diaria contra el imperialismo”, afirmó.
Maduro afirmó que los presidentes de la región pretenden “vernos por encima del hombro. Ellos, con su prepotencia, siempre nos han subestimado”.
“Por encima de la guerra económica, el pueblo tendrá el 20 de mayo su oportunidad de venganza, buscando una gran victoria”, afirmó.