Juan XII es conocido por ser uno de los Papas más polémicos de la historia. Octaviano de Túsculo fue el Papa número 130 de la iglesia que estuvo en su cargo desde 955 a 964.

Desde su ascenso al puesto se vio envuelto en enredos, los cuales provocaron que la comunidad eclesiástica siempre hablara sobre él. Él era hijo ilegítimo de Alberico II y fue impuesto por su padre elegido Papa tras la muerte de Agapito II cuando tenía menos de 18 años y sin formación ni experiencia religiosa, detalla El Español.

Juan XII tuvo que huir de Roma y depuesto de su cargo acusado de vicios y pecados, entre ellos el incesto, el homicidio y el sacrilegio. Muchos historiadores han puesto en duda sobre estas acusaciones y catalogándola como una especie de propaganda, aunque, aún hay muchos que defienden estas teorías y han marcado para siempre a Juan XII, al grado de que se le conozca como “El Papa fornicario”.

Para muchos se ganó este apodo pues decían que en su residencia de Letrán era común ver a prostitutas y esclavos con los que organizaba orgías y fiestas. Nunca lo negó ni ocultó , por lo que se le acusó de sacrilegio y los crímenes que lo siguieron hasta el final de sus días.

Su muerte, al igual que a lo largo de su vida estuvo marcada por la polémica. Una versión cuenta que tras su huida logró reunir un ejército con el que recuperó su mandato papal, aunque sólo unos meses después fue hallado muerto.

Otra teoría reza que el 14 de mayo de 964 fue asesinado con un martillazo en la cabeza por un marido que había descubierto al Papa con su mujer.

Y una final, donde los investigadores aseguran que murió de apoplejía durante un acto sexual.