REDACCIÓN
Los integrantes de la Junta de Gobierno del Banco de México se perfilan para dejar este jueves a su tasa de referencia sin cambio, aunque el tono de su comunicado de política monetaria puede matizarse con respecto a los anteriores, debido a un escenario complicado en donde prevalecen señales encontradas y mayor aversión al riesgo.
De una encuesta levantada por Bloomberg entre 21 especialistas, la totalidad coinciden en que el Banco de México dejará en 8.25 por ciento por tercera vez en el año, luego de que en el pasado diciembre la elevó por última vez en 25 puntos base.
El comportamiento de variables clave en México y un escenario internacional caracterizado por tensiones comerciales, no han modificado la expectativa de una baja en el costo del dinero por parte del instituto central, pero si ha influido en que probablemente se mueva con mayor cautela, lo cual podría derivar en un aplazamiento en el anuncio de dicha medida.
“Respecto a la decisión de política monetaria que se anuncia este jueves, se anticipa que Banxico mantendrá la tasa en 8.25 por ciento; lo interesante, en nuestra opinión, estará en los mensajes. En particular, habrá que estar atentos a si hay un voto unánime o diferenciado, si el tono general del comunicado cambia respecto al comunicado anterior, así como a la evaluación particular de los riesgos para la inflación y para la actividad, especialmente a la luz de las recientes sorpresas al alza para el primero de estos elementos y a la baja para el segundo” sostiene en un documento los analistas de Citibanamex.
De acuerdo con la última encuesta levantada por Citibanamex entre especialistas del mercado de deuda, se apuesta a un recorte en la tasa de referencia del Banco de México, aunque ahora se espera para el cuarto trimestre.
El consenso de los analistas encuestados prevé ahora que la disminución en la tasa tendría lugar en noviembre, en vez de septiembre considerado anteriormente, con lo que cerraría este año en 8 por ciento. En tanto que la proyección para 2020 se revisó al alza a 7.50 por ciento desde el 7.25 anterior.
Particularmente, se esperaría ver la postura del Banco de México con respecto al repunte de la inflación observado en el pasado abril, y el efectos en su balance de riesgos con relación al crecimiento económico tras el bache en cayó en el primer trimestre de este año.
Los precios al consumidor en México reportaron un crecimiento anual del 4.41 por ciento durante el pasado abril, cifra por arriba del 4 por ciento de un mes anterior.
La inflación a tasa anual no solamente fue la mayor en el año, sino que también se encuentra por arriba del rango máximo de tolerancia del Banco de México, que es actualmente del 4 por ciento.
En tanto que el comportamiento de la economía mostró una contracción de 0.2 por ciento, de acuerdo con cifras preliminares dadas a conocer por el Inegi.
“En contraste, y aunque hemos argumentado que es demasiado pronto para que los datos sugieran una desaceleración más rápida de lo esperado en la actividad económica de este año, los riesgos a la baja para la dinámica del producto continúan aumentando, lo que a su vez aumenta los riesgos de presión desinflacionaria” argumentan los analistas de Finamex Casa de Bolsa.
“Decisión de Banxico en medio de mercados bajo estrés” dicen los analistas de Banorte, debido a que a los factores externos se le viene a sumar también a un contexto externo complicado por los altibajos en las tensiones comerciales y por temores a un enfriamiento en la economía global.