En momentos en que Huawei es objeto de presión implacable por parte del gobierno de Donald Trump, el gigante chino de las telecomunicaciones tiene una ventaja que Estados Unidos no puede contrarrestar: una amplia cartera mundial de patentes sobre tecnología fundamental.
Huawei posee 56 mil 492 patentes activas en telecomunicaciones, redes y otros inventos de alta tecnología en todo el mundo, según Acclaim IP. La firma intensifica la búsqueda de regalías y derechos de licencia mientras se restringe su acceso a mercados y proveedores estadounidenses.
La compañía está en conversaciones sobre licenciamiento con Verizon y está en una disputa con el fabricante de chips Qualcomm sobre el valor de las patentes. Huawei también presentó reclamos contra Harris Corp luego de que el contratista de defensa la demandara el año pasado por violación de patentes de redes y seguridad en la nube.
“Las patentes son, en su nivel básico, armas de guerra económica”, comentó Brad Hulbert, abogado de patentes de McDonnell Boehnen Hulbert & Berghoff en Chicago.
Trump firmó una orden en mayo que debiera impedir a Huawei a vender equipos en Estados Unidos. Poco después, el Departamento de Comercio informó que colocó a Huawei en una lista negra que podría dejarla imposibilitada de hacer negocios con compañías estadounidenses.
“Huawei ha invertido mucho dinero y quiere ser reconocida”, planteó Jim McGregor, analista tecnológico de Tirias Research. “Huawei solo está llevando a cabo prácticas comerciales estándar para la industria inalámbrica”.