Georgina Ballesteros
La mañana de este miércoles nos levantamos con la mala noticia de que Tlaxcala volvía a ser referente nacional de forma negativa ya que a través de una investigación periodística señaló una vez más al municipio sureño del Estado, Tenancingo, como uno de los principales lugares donde concentra el delito de la trata de personas.
Fue a través de sendas notas periodísticas publicadas por El Universal y Grupo Fórmula donde se evidenció a las autoridades estatales y municipales como cómplices de este delito que desafortunadamente se ha vuelto una consigna para el Estado.
Citando como fuente a la Fundación Fray Julián Garcés, los periodistas Melissa Amezcua y Humberto Padgett señalan que “existen sólo 210 denuncias ante la Procuraduría General de Justicia del Estado (PGJE) entre 2011 y 2017, no obstante, sólo hay 9 sentencias condenatorias, lo que muestra que menos del 5 por ciento de los casos en los que las víctimas acudieron a las autoridades, terminaron en un castigo para los explotadores”.
La noticia señala que hay una insensibilidad de las autoridades y no se ha emitido una Alerta de Género a pesar de las denuncias constantes sobre desaparición de mujeres y jóvenes, lo que permitiría emprender acciones para disminuir este problema que aqueja principalmente a la zona sur del Estado.
La investigación realizado por ambos medios nacionales, evidencian a las autoridades, sobre todo porque hace señalamientos claros sobre nombres de padrotes, indica lugares donde supuestamente se ejerce la prostitución y la trata de personas y presenta casos concretos sobre la desaparición de personas, todo sin que hasta el momento se haya hecho al respecto.
