Redacción
A casi dos años del arresto de Pablo Lyle en Miami, Florida, por agredir a un adulto mayor que finalmente murió, su hijo lo extraña más que nunca, y como muestra el mensaje que recientemente compartió la pareja del actor.
A través de redes sociales, Ana Araujo, esposa de la estrella de Mirreyes Contra Godínez, narró en redes sociales una experiencia escolar del infante, en la que compartió uno de sus sueños.
“El viernes en una de las clases de la escuelita de Mauro les contaron un cuento sobre un niño que soñaba con volar y ser astronauta.
“Las maestras abrieron la conversación para que los alumnos compartieran su más grande sueño, entre poderes de súper héroe, como rayos láser, volar, correr rapidísimo, etc… Mauro quiso participar, levantó su manita virtual y cuando le cedieron la palabra dijo: ‘Mi más grande sueño es que mi papá regrese a Mazatlán”, escribió la empresaria.
Araujo dijo que ella estaba en la cocina cuando lo escuchó y fue testigo del acto, el cual denomino de vulnerabilidad e inocencia, aunque al mismo tiempo valiente.
La pareja del histrión aprovechó para enviar un mensaje a las familias que están pasando por alguna separación, sin importar el motivo.
“Abrazo a las familias que están pasando por situaciones de separación, sea cual sea la razón, lo poco que puedo compartirles es que no dejemos de soñar, no dejemos de confiar en el proceso y sigamos construyendo nuestra realidad aceptando la situación y haciéndole frente con amor y paciencia”, finalizó Ana.
El actor, de 34 años, está acusado de homicidio por haber golpeado fatalmente a un hombre mayor tras una discusión vehicular. Cumple arresto domiciliario en Miami y lleva en su tobillo un monitor GPS que le permite a las autoridades conocer sus movimientos las 24 horas del día.
El juicio por presunto homicidio del actor mexicano comenzará el 15 de marzo de 2021, determinó la jueza Marlene Fernández-Karavetsos. Además, fijó una nueva audiencia para analizar el estatus del caso el 14 de octubre.
“Tenemos que darle la oportunidad de ir a un juicio”, expresó la Magistrada después que el abogado defensor Philip Reizenstein le recordó que una Corte de apelaciones había rechazado el argumento de Lyle de que actuó en defensa propia, desechando así la posibilidad de una absolución sin recurrir a un juicio.
