Redacción

Es su ópera prima y tendrá un estreno mundial con su participación en la sección Panorama del famoso Festival Internacional de Cine de Berlín es su edición de este año, por lo que el cineasta fronterizo, Carlos Alfonso Corral, pondrá en el mapa una vez más al talento regional.

“Mucha gente que trabajaba en restaurantes se ha quedado sin empleo, buscando la manera de sobrevivir. Hay mucha gente que se ha quedado prácticamente en la calle”, afirma el cineasta, quien nació en El Paso, Texas en 1989 y creció en ambos lados de la frontera, entre Ciudad Juárez y El Paso, ciudades hermanas que documentó con su cámara fotográfica desde muy joven.

“Es muy común aquí que la gente cruce el puente tres, cuatro veces al día”, destaca el creador que se define a si mismo como chicano.

El cineasta juarense presentó en la sección de Panorama de la Berlinale el trabajo documental ‘Dirty Feathers’ (Plumas sucias).

Con imágenes en blanco y negro, el realizador documenta la precariedad y la exclusión en la que viven los protagonistas, personas sin techo en las calles de las ciudades fronterizas de El Paso y Ciudad Juárez

Son un total de 24 las voces de las personas que Corral capta en el documental pero el hilo conductor son las vidas de la pareja de Brandon y Reagan, de Nathan y de Ashley.

La crudeza del relato de Corral estremece desde la primera escena, ya que son relatos impregnados de la desesperación y desvalía ante una situación límite como el vivir en la calle.

Mirada crítica

El lente del cineasta ofrece una mirada cálida y humana sobre la vida cotidiana de una comunidad de personas sin hogar que vive en el El Paso, Texas, muy cerca de la fronteriza Ciudad Juárez, Chihuahua.

Carlos Alfonso Corral dice que rodó en blanco negro con la intención de evitar interpretaciones superficiales que el color pudiera generar en la exploración de lo que él llama el paisaje interno de sus personajes.

Retrata la esperanza

Los diálogos de los personajes (en inglés) y sus declaraciones ante la cámara son el hilo conductor de la cinta, que otorga un papel preponderante a las reflexiones de una joven de 17 años (Ashley Mistral), que ha encontrado una familia adoptiva en ese universo de personas marginadas.

Logrando un emotivo acercamiento, Corral documenta de igual forma el aspecto institucional bajo el cual el gobierno de Estados Unidos resuelve o intenta resolver esta problemática llevando su cámara a un centro de ayuda en donde las personas sin techo reciben alimentos y espacios para pernoctar y asearse.

Italiano de corazón texano

El filme, producido por Roberto Minervini, mentor de Carlos Alfonso, un italiano adoptado en Texas, quien destaca por ser una notable figura del cine contemporáneo. Comenzó a hacer lo que él llama películas artesanales después de involucrarse con las comunidades locales de su nueva patria. La película de carretera The Passage es su sorprendente debut.