Ulises Ávila

Familiares de Julio César N., joven que fue hallado sin vida en una barranca de Chiautempan, acusaron que la Procuraduría General de Justicia del Estado (PGJE) ha sido ineficiente para esclarecer las causas de la muerte  y la entrega del cuerpo de su pariente se ha retardado de manera drástica.

De igual manera, dijeron que personal de la dependencia se comportó de manera déspota al momento de solicitarles información respecto al caso y la fecha en que les devolverán el cuerpo.

De acuerdo a testimonios, Julio César N., fue internado en un anexo de Chiautempan, empero, a poco más de 10 días el personal del lugar informó a los familiares que el joven necesitaba medicamentos, pues su condición de salud se reportaba delicado.

Tras autorizar el suministro de medicamentos, los familiares fueron notificados de que el joven se había fugado del lugar y que desconocían su paradero.

Luego, hermanos y parientes salieron a buscarlo, hasta que el Ministerio público (Mp) confirmó el hallazgo del cuerpo sin vida en una barranca de Chiautempan.

Por medio de fotografías, los hermanos de Julio César afirmaron que se trataba de su familiar, por lo que solicitaron el cuerpo para darle cristiana sepultura.

No obstante, a más de una semana que el cuerpo entró a la PGJE, el personal se ha negado a entregar el cuerpo o mínimo a permitir que sus familiares lo vean.

Por tanto, los parientes argumentaron que hay discrepancias, tanto en el anexo, como en la PGJE.

En el caso de el anexo, reprocharon que Julio César se encontraba demasiado débil para escaparse, además que los trabajadores se han negado a mostrar videos donde presuntamente se puede ver cómo se escapa el joven.

Por lo cual, dijeron que presentarán denuncias por el homicidio.

Mientras que la PGJE, reiteraron que se ha manejado con despotismo y privación de acceso, por lo que, amagaron con tomar las instalaciones si no reciben una respuesta favorable.

Esto, debido a que se les dio a conocer que las evidencias de la escena aún no son procesadas, además que, pese a que ya se confirmó que no se trató de un homicidio doloso, los trabajadores de la dependencia se han rehusado a permitir acceso al cuerpo de Julio César, bajo el argumento de que aún está en necropsia.

Finalmente, famiares y hermanos del fallecido aclararon que sólo quieren recibir los restos mortales de Julio César, para sepultarlo.