Ulises Ávila

En un recorrido realizado por El Periódico de Tlaxcala, se pudo constatar que los tlaxcaltecas siguen invadiendo el espacio que fue destinado para la ciclovía “San Francisco”, instalada en la capital del estado.

Los objetos que siguen obstruyendo la ciclovía son autos estacionados, caja de comerciantes, motos y mamparas de comercios.

Pese a las señaléticas que fueron colocadas con pintura sobre las principales calles de la ciudad, los comerciantes y motociclistas se han empeñado en estorbar el paso de los ciclistas, de los cuales afortunadamente ninguno se ha accidentado a causa de la obstrucción de camino.

Cabe mencionar, que desde su instalación, la ciclovía se presentó como un problema para los comerciantes, residentes y choferes de transporte público, pues les arrebataron espacios que eran utilizados para estacionarse o colocar publicidad.

A ello, se suma que las condiciones en las que se encuentran las calles son deplorables, pues en días de lluvia hay encharcamientos que afectan a los ciclistas

Finalmente, cabe recordar que el fin de semana pasado, el huracán Grace dejó ver la mala calidad de la pintura que fue utilizada para marcar los límites entre la calle, ciclovía y banqueta.