Redacción
En las últimas semanas, las acciones de Facebook han caído aproximadamente un 5 por ciento, reduciendo miles de millones de su valor de mercado. Los legisladores han introducido leyes que podrían debilitar las protecciones legales de la empresa. Los accionistas presentaron una resolución para diluir el poder de su director ejecutivo, Mark Zuckerberg.
Todo eso ha sido en respuesta a las miles de páginas de investigación interna y testimonios proporcionados por Frances Haugen, exgerente de producto de Facebook. Ella ha dicho que los documentos muestran que la empresa elige las ganancias antes que la seguridad de los usuarios. Muchos de los documentos, llamados Facebook Papers, se compartieron con un consorcio de organizaciones de noticias que incluía a The New York Times.
Ahora, una de las preguntas más urgentes es si la Comisión de Bolsa y Valores (S.E.C., por sus siglas en inglés), la agencia federal a la que Haugen envió los documentos, se sumará significativamente a los problemas de la empresa.
Los denunciantes han presentado al menos nueve quejas a la agencia, que supervisa a empresas públicas como Facebook, utilizando una selección de documentos internos para argumentar que Facebook engañó a los inversores con una imagen más optimista de la empresa de la que creían que era cierta. El S.E.C. puede imponer grandes multas por engañar a los inversores e imponer restricciones a los líderes corporativos.
Un caso de los reguladores de valores probablemente está lejos de ser un éxito, dijeron varios expertos legales. Las acusaciones en las quejas no parecen ser tan claras como muchos otros casos de contabilidad y fraude asumidos por la agencia, dijeron.
El S.E.C. se negó a decir si había abierto una investigación. Incluso una medida así podría ser problemática para Facebook, lo que llevaría a deposiciones de altos ejecutivos y obligaría a la empresa a compartir comunicaciones privadas y otros documentos comerciales.
