Redacción
El Gobierno de Andrés Manuel López Obrador trazó como meta para México en 2040 la erradicación de los homicidios de personas menores de 18 años de edad y el embarazo infantil.
Dicha meta fue incluida en el Programa Nacional de Protección de Niñas, Niños y Adolescentes 2021-2024, publicado este último día del año en el Diario Oficial de la Federación.
“Desde una nueva perspectiva de respeto, promoción y pleno ejercicio de los derechos de las niñas, niños y adolescentes, la meta general hacia 2040 deberá ser la erradicación de los homicidios de personas menores de 18 años, así como del embarazo infantil”, indica.
Para el término de esta Administración, en 2024, la Federación busca reducir el número de carpetas de investigación por homicidios de niñas, niños y adolescentes a menos de 2 mil anuales.
Asimismo, llevar a cabo las estrategias y acciones enunciadas en el Programa para disminuir la tasa de fecundidad infantil a niveles menores a 1.6 nacimientos por cada mil niñas de 10 a 14 años.
De acuerdo con los datos del Secretariado Ejecutivo del Sistema Nacional de Seguridad Pública (SESNSP), las carpetas abiertas por homicidios de personas menores de 18 años pasaron de 2 mil 329 en 2015 a 2 mil 920 en 2018.
“De 2013 a 2015, la tasa de fecundidad infantil en niñas de 10 a 14 años pasó de 1.31 a 2.15 nacimientos por cada mil niñas en ese rango de edad; esto último se asocia al incremento en las violaciones sexuales a niñas menores de 15 años”, agrega.
“Un aspecto que merece particular atención es el estado de vulnerabilidad de la población infantil ante manifestaciones de violencia, las cuales han derivado en una tendencia creciente en el número de homicidios y en el embarazo infantil”.
Otra meta que incluyó el Gobierno federal en el Programa Nacional es reducir la mortalidad infantil a niveles menores de 8 niñas y niños muertos por cada mil nacimientos en 2024, y llevar a México a los niveles más bajos de mortalidad infantil de Latinoamérica.
“En Administraciones anteriores, México no logró la meta de reducción de la mortalidad infantil, la cual se estableció en los Objetivos del Desarrollo del Milenio en 10 niñas y niños muertos por cada mil nacimientos”, señala.
“El cambio de perspectiva de la nueva Administración, la cual pone énfasis en el cuidado y protección de la población en su etapa inicial de vida, queda de manifiesto y claramente estipulada a partir de las reformas constitucionales que dan origen a la Estrategia Nacional de Atención a la Primera Infancia (ENAPI)”.
‘Se requiere cambio de visión’
El Programa, elaborado por la Secretaría de Gobernación, advierte que los niños, niñas y adolescentes “no siempre” han recibido la atención prioritaria que les confiere la Constitución, las leyes y los acuerdos y convenios internacionales firmados por México.
Para que el marco normativo e institucional diseñado para la protección de los derechos infantiles cumpla plenamente su propósito, subraya el documento, se requiere un cambio de visión en la Administración pública que priorice los derechos de la niñez y la adolescencia.
“(Que sea) contrario a las visiones anteriores basadas en los mercados y el individualismo, las cuales consideraban que el Estado sólo debía asegurar el buen funcionamiento de los primeros y la libre elección de los segundos”, refiere.
“Sin considerar las inequidades y desigualdades históricas que impiden que todos las niñas, niños y adolescentes se desarrollen plenamente para alcanzar niveles adecuados de bienestar, con pleno respeto y ejercicio de sus derechos, independientemente de sus condiciones de origen social, étnico, cultural, geográfico, entre otras”.
De continuar con la visión de las Administraciones pasadas, agrega, la condición de pobreza de la población infantil y adolescente no podría mejorar y se acentuarían las brechas y condición de vulnerabilidad de la niñez y la adolescencia en México.
