Alonso Camarillo
Pocos son los municipios que hasta la fecha han publicado su reglamento de Bienestar y Protección Animal en Tlaxcala que, conforme a la Ley ordena a las administraciones municipales a formular estrategias de resguardo de animales domésticos lo que ha dado pie a que continúen las prácticas erróneas.
El caso más reciente ocurrió en Tepetitla donde el pasado 7 de marzo el ayuntamiento abrió una convocatoria para la “entrega voluntaria de perros y gatos”, acción que fue criticada por miembros de organizaciones animalistas ya que, señalan, este tipo de campañas fomentan la irresponsabilidad de la ciudadanía.
Asimismo, la organización civil cuestionó al municipio ya que es la segunda campaña realizada en menos de cuatro meses por lo que exigieron a las autoridades publicar su reglamento acorde a la Ley de Protección y Bienestar Animal del Estado.
La organización “Sin Maltrato en Tlaxcala” señala que, en los reglamentos, de incluir la entrega voluntaria de perros supuestamente agresivos, el dictamen deberá ser emitido por un etólogo que indique que el animal no podrá readaptarse.
Así como una serie de recomendaciones más como la conformación de un registro de dueños irresponsables para que a futuro no puedan volver a adquirir un perro, así como la capacitación correcta de funcionarios involucrados en el mencionado reglamento.
Y es que, como ya lo mencionó el Colectivo Pro Bienestar Animal Tlaxcala, las campañas de donación voluntaria de perros y gatos únicamente fomenta que se repita el ciclo de adopción irresponsable de animales entre la sociedad.
“No hay soluciones fáciles y la matanza de estos perros es un acto de irresponsabilidad”, sentencian los activistas quienes se mantienen a la espera de que el Congreso de Tlaxcala apruebe la reforma al Código Penal que considera al maltrato animal como delito.