A inicios de este año, la familia del actor anunció que Bruce Willis se vio forzado a retirarse pues fue diagnosticado con una enfermedad que afecta el habla. Sin embargo, la estrella de Hollywood no podía despedirse sin volverse a encontrar con una de las locaciones más importantes de una de sus películas más famosas, “Duro de matar”.
Esta película dirigida por John McTiernan se volvió un clásico de acción y de la cultura pop cuando se estrenó en 1988.
John McClane, el oficial retirado que interpreta Willis, debe enfrentarse a un grupo de terroristas que toman posesión de un rascacielos en la ciudad de Los Ángeles, conocido como el Nakatomi Plaza. Dentro de los rehenes que toman, está la esposa del expolicía, por lo que debe encontrar la forma de salvarlos.
Su emblemático regreso
Pese a su enfermedad, Bruce Willis se encuentra feliz y acompañado por su familia. Además nada le impide caminar por algunos lugares del pasado y recordar las épocas de gloria que vivió en los sets de grabación.
Su esposa, Emma Hemming, compartió en su cuenta de Instagram un video en el que se muestra al actor de regreso en la azotea del Nakatomi Plaza, 32 años después del estreno de la película. Fuera de la ficción, este edificio se llama Fox Plaza de Century City, aunque siempre será recordado como el edificio de la icónica película de acción
En un principio, se muestra a un Willis, de ya 69 años, apoyado sobre una baranda y con una vista espectacular de toda la ciudad.
Posteriormente, aparecen fragmentos de la “Jungla de cristal” y algunos de los momentos más icónicos que tuvo el actor. Todo esto, acompañado del “Himno a la alegría” de Beethoven como fondo musical, tal como sucedía en la cinta, sumándole mucho más dramatismo.