Claudia Orozco

Este miércoles frente al ayuntamiento de Tlaxcala se manifestaron el diputado local Miguel Ángel Covarrubias, y su hermano, el alcalde Arturo Covarrubias, quienes clausuraron simbólicamente las instalaciones.

Acompañados de aproximadamente un centenar de personas para exigir al alcalde Jorge Corichi, atender las deficiencias de seguridad en el municipio.

Luego que el alcalde de Texoloc fuera detenido por un reporte al 911 por presuntamente portar un arma de fuego y circular en presunto estado de ebriedad.

“Acudí de inmediato cuando mi hermano me habló alarmado de que estaba siendo injustamente detenido… No es posible que tengamos una policía así, que las autoridades del municipio no tengan la capacidad para detener a los verdaderos criminales”, dijo en una transmisión el diputado.

Por lo.qie este día se apersonaron con un grupo presuntamente originarios de Texoloc para manifestarse y clausurar de forma simbólica las puertas del ayuntamiento municipal.

Es de señalar que en redes sociales, algunos usuarios descalificaron el actuar de los funcionarios ya que señalaron, ambos cuentan con aspiraciones políticas rumbo a la elección local de 2024.

Entre sus exigencias piden una reunión con el alcalde Jorge Corichi, una disculpa pública y una política de seguridad que ayude a disminuir el índice delictivo en la capital.

“Desde aquí exigimos a Jorge Corichi que si no tiene capacidad, él y sus mandos para garantizar la seguridad, que renuncien”, finalizaron.


Jorge Corichi responde
Por su parte, a través de un comunicado de prensa el ayuntamiento de Tlaxcala contestó que el director de seguridad, Gabriel Cisneros, recibió la noche de ayer un reporte ciudadano que indicaba que el alcalde de Texoloc portaba un arma en el estacionamiento de la plaza comercial.

«El comandante entrevistó al conductor del vehículo identificado como Arturo “N”, quien se resistió a la revisión. En primera instancia los oficiales se percataron de que el individuo entregó a una persona que le acompañaba, una bolsa de la que no se apreciaba el contenido, para después introducirse a un domicilio particular. Al no poderse acreditar algún ilícito el conductor continuó su camino», refiere el boletín.