Lepra en México: 300 casos prenden las alertas en 28 estados, estos son los síntomas

Es una enfermedad tan antigua que hay registros de ella antes de la era moderna, pues en las Sagradas Escrituras la menciona como un mal repudiado y altamente contagioso, el cual ha sobrevivido más de 2023 años. Se trata de la Lepra, también conocida como Mal de Hansen, la cual está presente en 28 estados de México, con 300 casos en tratamiento.

Esto de acuerdo con el informe de Vigilancia Epidemiológica del 16 al 22 de julio, en el cual la Secretaría de Salud dio a conocer lo anterior. Este martes la dependencia informó que vigila prioritariamente a 12 municipios del país en los que se han registrado aumento en los casos de la enfermedad.

Afecta principalmente la piel. Foto: OMS. 

Municipios en vigilancia

Los municipios catalogados con un “alta presencia” de lepra son: Tuxcacuesco, San Sebastián del Oeste y San Cristóbal de la Barranca, en Jalisco; Nocupétaro y Nuevo Urecho, en Michoacán; Tlaltizapan, en Morelos; Lampazos, en Nuevo León; El Espinal, Santiago Niltepec y San Miguel Chimalapa, en Oaxaca; Choix, en Sinaloa, y Tunkas, en Yucatán.

Sin embargo, no son los únicos lugares donde hay presencia de la enfermedad, pues también se ha detectado en Baja California, Coahuila, Colima, Chiapas, Guanajuato, Guerrero, Morelos, Nayarit, Oaxaca, Quintana Roo, San Luis Potosí, Sonora y Tamaulipas.

Lepra tubercoloide. Foto: Manual MDS. 

¿Qué es la lepra?

De acuerdo con la Organización Mundial de la Salud (OMS), la lepra es una enfermedad infecciosa crónica, causada por una bacteria llamada Mycobacterium leprae, que afecta principalmente a la piel, los nervios periféricos, la mucosa de las vías respiratorias superiores y los ojos. Además de las deformaciones físicas, los afectados sufren también estigmatización y discriminación.

“Se puede curar y el tratamiento en las fases iniciales puede evitar la discapacidad”, señala la OMS.

La bacteria que causa la lepra. Foto: Manual MDS. 

Transmisión

La lepra se transmite a través de las gotículas expulsadas por boca y nariz. Para contraerla hay que mantener durante meses un contacto estrecho y prolongado con una persona afectada que no reciba tratamiento. En cambio, no se propaga por los contactos ocasionales con una persona con lepra que tienen lugar, por ejemplo, al darle la mano o abrazarla, compartir comida o sentarse junto a ella. Además, el paciente deja de transmitir la enfermedad cuando comienza a recibir tratamiento.

La lepra puede causar deformidades en distintas partes del cuerpo. Foto: Pixabay. 

Signos y síntomas

Según el Manual MDS, los síntomas de la lepra no suelen manifestarse hasta más de un año después de la infección (promedio entre cinco y siete años). Una vez que se presentan, avanzan con lentitud. La enfermedad afecta sobre todo la piel y los nervios periféricos. El compromiso nervioso produce entumecimiento y debilidad en las áreas controladas por los nervios afectados.

Sus síntomas dependen de la clasificación de la enfermedad:

  • Lepra tuberculoide: las lesiones cutáneas consisten en una o unas pocas máculas hipoestésicas con hipopigmentación central y bordes netos sobreelevados. Al igual que en todas las formas de lepra, el exantema no es pruriginoso. Las áreas afectadas por este exantema no tienen sensibilidad debido a la lesión de los nervios periféricos subyacentes, que pueden palparse como resultado de su mayor tamaño.
  • Lepra lepromatosa: gran parte de la piel y varias áreas del cuerpo, como los riñones, la nariz y los testículos, pueden estar comprometidas. Los pacientes presentan máculas, pápulas, nódulos o placas en la piel, que a menudo son simétricos. La neuropatía periférica es más grave que en la lepra tuberculoide, con más áreas entumecidas. Algunos grupos musculares pueden estar debilitados. Los pacientes pueden desarrollar ginecomastia o perder las pestañas y las cejas.
  • Lepra limítrofe: se identifican características tanto de la lepra tuberculoide como de la lepra lepromatosa. Sin tratamiento, la gravedad de la lepra limítrofe puede disminuir y convertirse en una forma más semejante a la tuberculoide, o puede empeorar y transformarse en una forma más similar a la lepromatosa.

Noticias

Síguenos en redes