Claudia Orozco
Tan solo en 2023, el Albergue La Sagrada Familia reportó que atendió a 275 mujeres migrantes, de las cuales, 35 eran niñas acompañas y cinco niñas y adolescentes no acompañadas.
Agregando que las mujeres migrantes en tránsito por Tlaxcala enfrentan no sólo las prácticas machistas de sus acompañantes o familias, sino delitos como el abuso de autoridades por parte de personal del Instituto Nacional de Migración (INM) y de la Guardia Nacional (GN).
Además de agresiones documentadas como la violación, el secuestro, el robo, la trata, la desaparición y otras formas de violencia de género.
En ese sentido, el albergue documentó que al menos el 20% de las mujeres solicitó asesoría en materia de refugio, es decir, 55 decidieron denunciar agresión o contextos violentos en sus países y durante el transcurso de su viaje migrante.
Lamentablemente, la dinámica de la violencia impide a muchas mujeres denunciar a sus acompañantes, familias y contextos.
Por lo que la Sagrada Familia, exhortó al gobierno estatal, a diseñar políticas públicas migratorias con perspectiva de género, que miren los contextos de la migración femenina y logren empoderar, visibilizar y proyectar nueva maneras de entender la migración de las mujeres y fortalecer la ayuda con programas de igualdad de género.
Otros datos del albergue de Apizaco refieren que 11 mujeres migrantes que acudieron a las instalaciones viajaban embarazadas, 183 recibieron ayuda médica y 84 recibieron kits de higiene que las ayudó durante su trayecto hacia el país del norte.