El organismo ha apoyado el esfuerzo de profundizar la inclusión financiera y ampliar el acceso al financiamiento.
l desembolso de este préstamo está etiquetado para el cumplimiento de objetivos y conforme vayan alcanzándose ciertas metas de ejecución, el Banco Mundial otorgará parcialidades.
Del resto de los préstamos citados, cuatro aparecen “desembolsados en su totalidad”; los dirigidos a resiliencia y sustentabilidad del medio ambiente urbano; otro más dirigido a la sustentabilidad de la fortaleza económica; uno más por la sostenibilidad del crecimiento inclusivo de México y uno más que financió el Sistema Nacional de Identidad para facilitar la inclusión.
Uno de los cinco préstamos activos está identificado como “en proceso de desembolso”, por 700 millones de dólares y está dirigido a impulsar políticas de desarrollo para la promoción de oportunidades económicas para las mujeres y el crecimiento sostenible.
El más reciente, aprobado el 3 de junio pasado, para políticas de desarrollo financiero sostenible e inclusivo, aún no está documentado en la lista de proyectos, por el cierre del año fiscal del Banco Mundial.
El costo de estos financiamientos tiene una tasa más competitiva que las ofrecidas por el mercado y viene con cláusulas para que expertos del organismo acompañen al acreditado en la ejecución del proyecto.
Información oficial del organismo muestra que los clientes pueden limitar la variabilidad de las tasas de interés con límites superiores e inferiores a partir del pago de una prima inicial para adquirir esta protección.
Acceso a financiamiento
Información del Banco Mundial, muestra que en México, el organismo ha apoyado el esfuerzo de profundizar la inclusión financiera y ampliar el acceso al financiamiento que dice, “ha sido un obstáculo crítico para el crecimiento y la reducción de la pobreza”.
Declararon que “el Banco ha apoyado la expansión de México del acceso financiero necesario a las poblaciones pobres y rurales, las mujeres, los jóvenes y las micro, pequeñas y medianas empresas (Mipyme)”.
“A través de una red establecida de intermediarios financieros privados, por ejemplo, el Proyecto de Ampliación de la Financiera Rural (que ya desapareció), aumentó la disponibilidad de financiamiento para las Mipymes rurales en zonas donde los bancos comerciales no habían podido llegar a los productos locales”.
Este proyecto, ayudó a establecer y/o mejorar la capacidad crediticia de 255 pequeños intermediarios en zonas rurales.
Cada año, al menos desde 2020, el gobierno de México ha adquirido compromisos financieros con el organismo, siendo el 2021, el que quedó como el de mayor volumen de obligaciones adquiridas por 1,725 millones de dólares.