S. López
Los recorridos turísticos en la capital de Tlaxcala están repletos de baches, basura, fachadas desgastadas, banquetas cuarteadas, calles en mal estado y fauna nociva, ese es el común denominador que predomina en la imagen que se da al turismo nacional e internacional por parte del gobierno municipal de Alfonso Sánchez García.

En el tranvía turístico, se lleva a los visitantes y turistas a recorrer deversos puntos de la capital del estado, entre ellos la Basílica de Ocotlán, el Mirador, Las Escalinatas de los heroes, entre otros puntos.

Sin embargo, la administración municipal no ha hecho nada por reparar y mejorar las calles, mismas que se encuentran en pésimas condiciones, llenas de baches y en algunos casos mal bacheadas.

A lo largo de los trayectros turísticos abunda la basura, la falta de limpieza en guarniciones y banquetas, mismas que se encuentran con hierba, aunado a fachadas en mal estado, sin la atención de imagen urbana, etc.

Así los, turistas nacionales y extranjeros que llegan a la Basílica de Ocotlán, sí encuentran una joya arquitectónica de gran belleza, pero demeritada por todo lo que hay a su alrededor, comercio informal y mal regulado, calles con adoquines sumidos a un costado de la presidencia de comunidad, rejillas de drenaje sumidas y otras más sin estos implementos, etc.

Además de semáforos inservibles, que se encuentran parpadeando en rojo, esto en la avenida Juárez, que es la avenida prinicipal de la capital del estado a solo dos cuadras de la Plaza de la Constitución y de la presidencia municipal.

Esto y más es lo que se ofrece a todos los turistas que llegan para conocer Tlaxcala, aquella que su lema dice “Tan mágica que ni te la imaginas”.