Redacción
El sector de entrega de comida a domicilio (delivery) está registrando un crecimiento sin precedentes durante el confinamiento anunciado en gran parte del mundo por la pandemia de coronavirus (Covid-19).
La demanda de estos servicios ha hecho que empresas como DiDi Food crezcan a doble dígito en México y que Uber Eats haya sido, literalmente, el salvavidas de Uber en el primer trimestre del año.
Con el inicio de la fase 3 de la pandemia, cinco de cada 10 consumidores decidieron realizar sus comprar en línea para evitar salir de sus casas, reveló el segundo reporte sobre el Impacto del Covid-19 en Venta Online en México, realizado por la Asociación Mexicana de Venta Online (AMVO).
En el documento se detallan las categorías en las que los consumidores online han comprado más en este periodo: comida a domicilio, con 40%; moda, 30%; supermercado, 28%; productos para el aseo del hogar, 26%, y electrónicos, 24%.
Durante la contingencia, 55% de los consumidores mexicanos ha adquirido productos y servicios vía online para no salir de casa.
Estos datos concuerdan con los registrados por DiDi Food, que desde el inicio de la Jornada Nacional de Sana Distancia reportó un incremento de 45% en las ventas totales de restaurantes en demanda y en valor del ticket.
La industria alimentaria fue declarada actividad esencial, por lo que no se vio obligada a cerrar durante el confinamiento impuesto por el gobierno federal.
Sin embargo, el servicio de alimentos tendría que ser a domicilio, lo que generó un interés orgánico de los restaurantes en ampliar sus canales de venta. Interés captado por las empresas del sector delivery.
“Desde el inicio de la contingencia, los registros de restaurantes en nuestra plataforma han crecido 75% semana por semana de manera orgánica”, asegura Andrea Vidales, gerente de comunicación de DiDi Food: “En los últimos días se han sumado a nuestro equipo restaurantes como El Bajío, Cancino, Burger King, Italianni’s´y The Cheesecake Factory, entre otros”.
El crecimiento de Uber Eats no se queda atrás, e incluso la rama de entrega de comida a domicilio de Uber salvó a la compañía originaria de San Francisco de un desastroso primer trimestre de 2020, que, según varios analistas, sería uno de los peores en la historia de la empresa debido a las medidas de confinamiento anunciadas en gran parte del mundo.
Durante enero, febrero y marzo de 2020, Uber reportó ingresos por 3 mil 543 millones de dólares, es decir, 14% más que el mismo periodo de 2019. De acuerdo con el informe trimestral, las ganancias estuvieron respaldadas principalmente por su vertical Uber Eats, que por sí misma creció 54% durante el primer trimestre del año.
“Si bien nuestro negocio de viajes ha sido golpeado por la pandemia en curso
Rappi, por su parte, incrementó su número de usuarios prime, que ya representan 50% de su membresía, de 35% que tenía ese esquema antes de la emergencia sanitaria.
Repartidores, la materia prima
El crecimiento de estas empresas no sería posible sin el eslabón más débil de la cadena de servicios de entrega a domicilio: los repartidores.
La eventualidad del confinamiento y el crecimiento de pedidos de comida a domicilio ha obligado a las empresas de delivery a aumentar su flota de socios repartidores, mismos que han encontrado en la entrega de alimentos una forma de sobrevivir a la pérdida desmedida de empleos.
Tan sólo en abril, Rappi buscó aumentar en 5 mil el número de sus repartidores, para afrontar lo que resta del confinamiento con 40 mil “rappitenderos”.
“El interés de los socios repartidores ha crecido desde el inicio de la cuarentena. Los nuevos registros han aumentado hasta 250% semana por semana. Son personas que desean un ingreso extra. La última semana, DiDi Food tuvo un aumento en el número de registros de 90%”, aseguró Andrea Vidales.
Los repartidores de estas plataformas no son contratados. La gran mayoría labora bajo un esquema de “socios” y sólo reciben un porcentaje del costo del envío de los productos, por lo que las empresas no tienen obligaciones patronales. Esto significa que, pese a estar constantemente expuestos a ser contagiados de Covid-19, no cuentan con seguridad social ni prestaciones.
No obstante, ante la emergencia sanitaria, la plataforma DiDi creo un fondo de 10 millones de dólares a nivel mundial para apoyar a sus conductores y repartidores que sean diagnosticados con la enfermedad o sean puestos en cuarentena.
Para acceder a esta ayuda, los repartidores de DiDi Food que resulten positivos a coronavirus deberán comunicarse a servicio al cliente y enviar un comprobante que indique que fueron contagiados. De forma inmediata serán bloqueados de la plataforma y se les otorgará un pago semanal, durante 28 días, de mínimo 800 pesos y que puede ser mayor si sus ganancias semanales eran superiores a ese monto.
En caso de que el repartidor no pueda acceder a una prueba, pero sea puesto en cuarentena obligatoria de forma preventiva, la empresa también otorgará al trabajador un monto mínimo de 800 pesos a la semana. Sin embargo, este apoyo sólo será por 15 días.
En este caso, el repartidor deberá presentar una receta médica oficial o un comprobante de salud.
Los adultos mayores de 65 años que trabajan en DiDi, al ser considerados población vulnerable, también pueden acceder a este bono. Esto tiene como objetivo que las personas con algún tipo de comorbilidad no salgan de casa.
Uber Eats ofrece un apoyo similar a sus socios repartidores registrados en su aplicación.