Cargill, una de las mayores empresas agrícolas mundiales, se ha unido a Bill Gates y otros gigantes empresariales para invertir en una tecnología naciente para producir carne a partir de células animales autoproductoras en medio de la creciente demanda del consumidor de proteínas que dependen menos del pienso, la tierra y el agua.
Memphis Meats, que produce carne de res, pollo y pato directamente de células animales sin criar y sacrificar ganado o aves de corral, recaudó 17 millones de dólares de inversionistas incluyendo Cargill, Gates y el multimillonario Richard Branson, de acuerdo con un comunicado el martes en el sitio web de la startup de San Francisco.
La ronda de recaudación de fondos fue dirigida por la firma de capital de riesgo DFJ, que ha apoyado previamente a varios startups minoristas con conciencia social.
Este es el último paso de un gigante agrícola para responder a los consumidores, especialmente a la llamada generación del milenio, que están dejando su huella en el mundo de los alimentos en Estados Unidos, ya sea a través de la creciente demanda de productos orgánicos, un mayor enfoque en alimentos considerados sostenibles o una mayor atención en el trato a los animales.
Los grandes procesadores de aves y ganado han comenzado a utilizar alternativas a la carne tradicional.
“A todo el mundo le encanta comer carne y es fundamental para muchas de nuestras culturas y tradiciones”, dijo Uma Valeti, cofundador y presidente ejecutivo de Memphis Meats, en el comunicado. “La forma en que se produce la carne convencional hoy en día plantea retos para el medio ambiente, el bienestar de los animales y la salud humana. Estos son problemas que todo el mundo quiere resolver”.
’Carne limpia’
Hasta la fecha, Memphis Meats ha recaudado 22 millones de dólares, lo que indica un compromiso con el “movimiento de carne limpia”, dijo la compañía.
Sonya Roberts, presidente de empresas de crecimiento de Cargill Protein, confirmó la inversión de la empresa en Memphis Meats en un correo electrónico, sin revelar el monto.
“Creemos que los consumidores seguirán anhelando la carne, y apuntamos a llevarla a la mesa de la manera más sostenible y económica posible”, dijo Roberts. “Las carnes cultivadas y las carnes producidas convencionalmente jugarán un papel en el cumplimiento de esa demanda”.
La inversión es solo la más reciente de las empresas tradicionales de carne.
Tyson Foods, el mayor productor de carne de Estados Unidos creó un fondo de capital de riesgo enfocado a invertir en compañías “para alimentar de manera sostenible” a la creciente población mundial y en diciembre anunció una participación en el productor de proteínas vegetales Beyond Meat, que cuenta Gates entre sus primeros financistas.