El multimillonario británico Richard Branson, propietario de la aerolínea Virgin, se atrincheró en la bodega de vinos de su isla privada en el Caribe durante el paso del huracán Irma.

“Hemos pasado una noche de viento huracanado y lluvia a medida que Irma se acerca”, explicó Branson en su blog.

“Dormimos todos en dos habitaciones. No había vivido una fiesta de pijamas así desde que era un niño”, añadió.

El multimillonario se encuentra con su personal en su isla privada de Necker, en las Islas Vírgenes británicas, al este de Puerto Rico.

Sus invitados se fueron o pospusieron su visita por seguridad, había explicado en un artículo anterior.

Branson dijo que se refugiarán “en la bodega de vinos de paredes de hormigón”.

“Conociendo a nuestro maravilloso equipo como lo conozco, sospecho que quedará poco vino cuando salgamos”, bromeó.

Branson expresó su confianza en que las viviendas de su isla soporten bien el huracán, pero dijo que su “principal preocupación” es la gente de las islas.

“Puede resultar extraño, pero considero a los huracanes como una de las maravillas del mundo natural”, aseguró.

Reportan muerte de surfista. El surfista Zander Venezia, considerado una de las promesas de ese deporte, falleció ayer en la isla de Barbados cuando practicaba su deporte en las aguas agitadas por el huracán Irma, de acuerdo con información difundida por la página de la World Surf League (WSL).

Según la fuente, Venezia era originario de Bridgetown, en Barbados, y su deceso ocurrió cuando se impactó contra un arrecife cerca de su casa, en el este de la isla, en una zona conocida como Box by Box.

Precisó que el joven “tomó una ola especialmente peligrosa” y se impactó contra el arrecife. Las labores de rescate se complicaron porque costó mucho tiempo sacarlo del agua debido al oleaje provocado por el huracán. Agregó que la familia está a la espera del resultado de la autopsia.

El huracán Irma, de categoría 5, impactó la madrugada de ayer en islas del Caribe como Antigua y Barbuda o Saint Martin.

Su fuerza en la región fue de tal magnitud que obligó a desviar la ruta del avión que trasladó al papa Francisco desde Roma hasta Colombia. Su vuelo llegó con una hora de retraso al aeropuerto de El Dorado, en Bogotá, debido al desvío que tuvo que hacer, ya que no fue posible que sobrevolara Puerto Rico, como tenía previsto. Agencias