La apuesta del Instituto Nacional Electoral (INE) es que después de las elecciones del 1 de julio, toda la actividad económica, política y social del país continúe “gane quien gane” y se confirme la vía institucional como la forma de renovar el poder en México.
Así lo manifestó el consejero presidente Lorenzo Córdova durante la 81 Convención Bancaria, que se realiza en Acapulco, Guerrero, donde puntualizó que las elecciones no son una fecha fatídica, pero todos deben cumplir con las reglas para asegurar la paz y la estabilidad.
“El 2 de julio en este país seguiremos viviendo más de 120 millones de personas, nuestras necesidades y anhelos permanecerán y también muchos de nuestros problemas (…). Toda esa actividad va a continuar gane quien gane y esa es la apuesta del INE, que las elecciones sean íntegras, que se refuerce y confirme la vía institucional para renovar periódicamente el poder y que la disputa por el mismo no sea disruptiva para el país”, expresó.
En su ponencia ante los integrantes de la Asociación de Banqueros de México (ABM), señaló que para lograr ese objetivo, todos deben cumplir con su tarea, por lo que mientras las autoridades electorales cumplen con la organización de los comicios y la resolución de las disputas, los candidatos y los gobiernos también deben apegarse a las normas.
Y enfatizó que las autoridades gubernamentales no deben involucrarse en los comicios: “Los gobiernos deben cumplir con la prohibición constitucional de mantener la imparcialidad política tanto en su actuación como en el uso de los recursos a su cargo y ser respetuosos de no intervenir”.
Córdova resaltó que el INE ve en la banca mexicana un aliado estratégico en materia de fiscalización, pues recordó que en 40 días realizará la fiscalización de todos los candidatos, para garantizar que “la sombra del financiamiento opaco o ilícito no enturbie nuestras elecciones ni dañe su credibilidad, comprometiendo la estabilidad y con ello la legitimidad de los gobiernos que sean democráticamente electos”.