Ashley Judd quiere que Harvey Weinstein responda por la “conducta ilegal” que le provocó pérdidas no solo de dinero sino también de estatus, prestigio y poder.
Judd, quien está demandando al otrora magnate de Hollywood, estuvo entre las primeras mujeres que denunciaron a Weinstein de violencia sexual el año pasado, colocándose al frente del movimiento #MeToo. La actriz habló en el programa “Good Morning America” de ABC el martes, un día después de presentar su demanda en la Corte Superior del Condado de Los Ángeles.
Judd dijo que Weinstein perjudicó su carrera en venganza por rechazar sus propuestas sexuales.
Su demanda va más allá de las querellas de abuso sexual, ya que lo acusa de prácticas empresariales fraudulentas bajo las leyes contra la competencia desleal. Quiere “arrojar luz sobre los daños económicos más amplios ocasionados cuando individuos en posiciones de autoridad intentan castigar a aquellos que se han resistido a sus avances inapropiados”, dijo el abogado de Judd, Theodore J. Boutrous Jr.
Judd, de 50 años, dijo en su entrevista televisada que su objetivo mayor es promover “sitios de trabajo seguros y legales”. Manifestó que se siente maravilloso pronunciarse en nombre de su “yo más joven”.
Un representante de Weinstein dijo en un comunicado que “la investigación más elemental de los hechos revelará que el señor Weinstein no difamó a la señorita Judd ni interfirió con la carrera de la señorita Judd, y que por el contrario, no solo defendió su trabajo sino que aprobó repetidas veces sus castings”.
“Defenderemos enérgicamente estas afirmaciones”, añadió.