Facebook y Twitter pondrán normas más estrictas para la propaganda política en un intento por aumentar la transparencia y frenar la manipulación del servicio antes de las elecciones intermedias en Estados Unidos.

En el caso de Facebook, los anuncios que provengan de candidatos específicos incluyen desde octubre una etiqueta de divulgación.

La red social ha dicho que también requerirá esa etiqueta sobre los anuncios que apoyan temas específicos de partidos externos, pero no dio más detalles. Las nuevas reglas entran en vigor este jueves.

Los anuncios de temas específicos tuvieron un importante papel en los esfuerzos de Rusia por interferir con las elecciones de Estados Unidos en 2016.

Facebook indicó que cuando los usuarios dan clic sobre la etiqueta de un anuncio de ese tipo, serán remitidos a una página con más información, que incluye quién pagó por la publicidad y cuánta gente la vio.

No será sencillo definir lo que se considera un anuncio de tema específico. Aunque la educación y la inmigración pueden ser temas políticos, por ejemplo, los anuncios de una universidad o de un abogado migratorio no serían considerados políticos.

La red social explicó que comenzará con una lista de 20 temas, incluida inmigración y política exterior, y que también tendrá como objetivo los anuncios “que tengan como meta influenciar el debate público, promover una medida electoral o elegir un candidato”.

Facebook ha señalado que requerirá que cualquiera que quiera comprar anuncios de temas específicos en Estados Unidos confirme su identidad y ubicación. La compañía dijo que está invirtiendo en más trabajadores y tecnología para identificar posibles abusos.

La empresa de Mark Zuckerberg exhortó a los usuarios a que reporten los anuncios que tengan contenido político y no estén etiquetados. A los infractores se les prohibirá lanzar anuncios políticos, agregó la red social.

En el caso de Twitter, la compañía exigirá a los anunciantes que publican anuncios de campañas políticas para las elecciones federales que se identifiquen y certifiquen que están ubicados en Estados Unidos.

Los candidatos y comités deben proporcionar su identificación de la Comisión Federal Electoral (FEC, por sus siglas en inglés) y las organizaciones registradas que no sean miembros de la FEC deberán presentar un formulario notariado.

Twitter señaló que no permitirá que ciudadanos extranjeros dirijan anuncios políticos a estadounidenses.

La plataforma también planea colocar un distintivo visual e información de exención de responsabilidad en el contenido promocionado de cuentas certificadas, que identifica quién patrocinó o pagó por el tuit.

Esta semana, la compañía anunció que etiquetaría las cuentas de campaña política de candidatos que se postulan para gobernador estatal, el Senado estadounidense o la Cámara de Representantes del país en las elecciones legislativas de noviembre.

“Estas etiquetas contienen información relevante sobre un candidato político, incluido el cargo al que se postula el candidato, el estado del cargo al que se postula, el número de distrito (cuando corresponda) y será claramente identificable con un pequeño ícono de un edificio gubernamental”, indicó Twitter en un blog.