Raúl Ramos
El incremento de los asaltos al tren en su paso por el estado de Tlaxcala, pone en riesgo la integridad física de los migrantes, ya que los hampones siempre portan armas de fuego que podrían detonar en contra de quienes viajan abordo.
Así lo consideró el sacerdote Elías Dávila Espinosa, responsable de la Casa del Migrante “La Sagrada Familia” de Apizaco, quien repudió la falta de protección de los derechos de los indocumentados.
“Desde el momento en el que suben al tren saben que está en riesgo su vida, hay bandas bien organizadas que se dedican a este tipo de atracos y no les importa si van mujeres, niños o personas mayores”, precisó.
Dávila Espinosa, informó que este año incrementó el flujo de migrantes en Tlaxcala, “y para quienes el único medio de transporte es el tren, los robos les origina más inseguridad, incluso algunos que pasan por el tren han sufrido atracos y ataques violentos que ponen en riesgo su integridad”.
Dávila Espinosa mencionó que hasta abril de este año “teníamos a poco más de tres mil migrantes en Apizaco y sigue la afluencia, ya sea hombres o mujeres solos, familias o madres solas con sus hijos menores de edad”.
