REDACCIÓN
Nelson Vargas, ex titular de la Comisión Nacional de Deporte (Conade), pidió la intervención del presidente electo Andrés Manuel López Obrador para que se dicte sentencia a los secuestradores y homicidas de su hija Silvia Vargas, ocurrido hace 11 años.
“Quiero pedirle a mi amigo Andrés Manuel López Obrador a que me ayude a resolver mi caso…”, dijo Vargas en conferencia de prensa al señalar que resolver este asunto es un tema de voluntad.
Y es que acusó que la Procuraduría General de la República (PGR) de llevar mal el caso, lo que propició que fuera liberado uno de los ocho detenidos por fallas en el debido proceso y que, además, no se ha podido detener a tres implicados más y que siguen prófugos.
Sergio Bravo, abogado de Nelson Vargas, explicó que a los siete detenidos se les “está consintiendo mucho gracias al nuevo sistema de justicia que es hipergarantista al grado de que los detenidos se han negado a acudir a las audiencias porque no se quieren levantar temprano y argumentan que hace mucho frío”.
Incluso, y aunque reconoció que existen pruebas en contra de los detenidos, principalmente contra Cándido Ortiz González y sus hermanos Raúl y Óscar, líderes de Los Rojos, existe la posibilidad que queden libres.
Recordó que los inculpados promovieron recursos legales acusando tortura durante su detención y un juez autorizó la intervención de la Corte Interamericana de Derechos Humanos para que se les practique el Protocolo de Estambul y con base en ello determinar si les violaron sus derechos humanos.
El litigante explicó que Jose Luis Medina ‘El Chimo’, uno de los detenidos salió libre pese a la sentencia de 34 años de prisión que le dictaron en primera instancia, pues se amparó y un juez aceptó su argumento de violación al debido proceso.
Lo anterior, porque acusó que al declarar en ella PGR no estuvo asistido por un abogado, aunque si tuvo a una persona de confianza como marcaba la antigua legislación.
Al respecto, Nelson Vargas advirtió que la PGR llevó mal el caso y los jueces lo que hacen es batear todas sus actuaciones.
“Están jugando con la vida de la gente que para ellos son expedientes, son papeles, pero no se ponen a pensar que detrás de esos expedientes, detrás de esos papeles hay personas”, dijo.
Asimismo insistió en que no se sabe qué esperan los jueces para sentenciar a los responsables, “hay evidencias clarísimas, los principales responsables siguen burlándose de la autoridad y a nadie le importa”.
