Isabel Miranda
La crisis económica que abarca al sector campesino de Tlaxcala, se agudizará al cierre de 2018 y es necesario que el gobierno del estado tome cartas en el asunto, escuchando las propuestas de las organizaciones de ese sector, consideró el dirigente de la Coalición de Organizaciones Democráticas, Urbanas y Campesinas (CODUC) en Tlaxcala, Alejandro Martínez Hernández.
Lo anterior, dijo, porque desde hace meses que representantes de los sectores campesinos del estado han buscado ser recibidos en una reunión de trabajo con el jefe del ejecutivo local, pero es la fecha en que no ha sido así que los labriegos no pueden acceder a plantear su plan de ayuda económica a las familias en situación vulnerable del campo.
Como muestra, se refirió a la desesperación que han manifestado los ejidatarios de la región de Huamantla, que han pedido el apoyo necesario al ejecutivo para analizar el problema de ausencia de lluvia suficiente para sus cultivos.
Eso forma parte de las 100 mil hectáreas de diversos cultivos afectadas por el clima que reportó hace unos días del Congreso Agrario Permanente, lo cual es un problema real y que las autoridades del sector no han querido ver.
Agregó que en la Secretaría de Fomento Agropecuario (SEFOA) y en la de Agricultura Ganadería Pesca y Alimentación Delegación Tlaxcala (SAGARPA), no les creen cuando les reportan las centenas de hectáreas afectadas por las inclemencias del campo, por lo que tienen que ir a verificar y certificar la perdida, pero tampoco lo hacen, y el tiempo no espera ni las necesidades propias de los campesinos.
“Yo espero de verdad que el gobierno del estado ponga atención, y que la SEFOA haga lo propio, porque si titular nomás no tiene tiempo para escuchar a los productores, se esconde cuando los buscamos en sus oficinas.”