Dos ataques rebeldes en Yemen matan a 51 personas

REDACCIÓN

Al menos 51 personas murieron y 56 más resultaron heridas en un ataque con misil y atentados suicidas coordinados en la ciudad portuaria de Adén, en el sur de Yemen, dijeron funcionarios locales.

El misil alcanzó el barrio de Breiqa, donde se realizaba un desfile militar de fuerzas leales a Emiratos Árabes Unidos, miembro de la coalición liderada por Arabia Saudita que lucha contra los rebeldes hutíes desde 2015, en nombre del gobierno yemení reconocido por la comunidad internacional. El ataque con misil mató al menos a 40 personas.

Desde que los rebeldes, que cuentan con el respaldo de Irán, tomaron la capital, Saná, en 2014, Adén es la sede temporal del gobierno.

El desfile tuvo lugar en el campamento al-Galaa, partidario de la coalición, dijo un funcionario de seguridad, que no dio más explicaciones sobre las víctimas.

Los rebeldes dispararon un misil balístico de alcance medio contra el desfile y causaron docenas de víctimas, incluyendo varios comandantes, explicó el general de brigada Yehia Sarea, vocero de los rebeldes, en declaraciones publicadas en el cibersitio del grupo, Al-Masirah.

Entre los fallecidos estaba el comandante Monier al Yafie, también conocido como Aboul Yamama, que estaba respaldado por Emiratos, dijo el funcionario de seguridad.

El oficial ofrecía un discurso durante el acto, agregó.

Un poco antes, un coche, un autobús y tres motocicletas cargadas con explosivos estallaron en una comisaría de policía durante la formación matinal de los agentes, señaló Abdel Dayem Ahmed, un alto cargo de la policía. En la operación participaron cuatro suicidas, agregó.

Ningún grupo se atribuyó de inmediato la autoría del atentado en la sede policial. Tanto la filial de Al Qaeda en Yemen como la del grupo extremista Estado Islámico aprovecharon el caos en que está sumido el país por la guerra entre los hutíes y las fuerzas del gobierno, apoyadas por la coalición liderada por Arabia Saudí.

El viceministro del Interior, Ali Nasser Lakhsha, dijo a reporteros que inspeccionó el lugar de los atentados suicidas y que no estaba claro quién era el responsable de estos actos criminales.

“Este es un horrible ataque terrorista contra nuestra policía”, afirmó el funcionario.