Redacción

Durante el pasado fin de semana, al menos un oficial de policía y un bombero fallecieron atropellados en la ciudad de Lubbock, luego de que terribles tormentas causaran un accidente vehicular múltiple. Según las declaraciones del departamento de policía de la ciudad, el policía y al menos un par de bomberos se encontraban atendiendo el incidente durante la mañana del sábado, cuando un automóvil que circulaba a gran velocidad los arrolló.

Las víctimas fueron identificadas como: el policía Nicholas Reyna, de 27 años, quien murió en el lugar; y el bombero teniente David Hill, de 39 años, que fue llevado a un hospital local donde luego murió. En el incidente también se encontraba el bombero Matthew Dawson, de 30 años, que fue hospitalizado en estado crítico debido a las heridas que sufrió durante el incidente.

El jefe de la policía de Lubbock calificó lo sucedido como un “día extremadamente trágico” para la ciudad. Mientras que el jefe de bomberos de la ciudad, Shaun Fogerson, declaró que “Si la gente respetara las condiciones de la carretera, cosas como esta no tendrían que suceder”. Las severas tormentas que han azotado el sur del territorio estadounidense también dejaron un muerto el viernes por la noche y se sospecha de que los rayos registrados durante las tormentas provocaron el incendio de dos propiedades en las ciudades de Burleson y Mansfield al norte de Texas.