Lo difícil que es convertirse en mamá durante la pandemia

La calles están vacías. Los comercios, en su mayoría, cerrados. Ir al parque no es una opción, y menos visitar a la familia. Si ya de por sí este panorama es desolador, imagínense lo difícil que es estar embarazada en tiempos de la pandemia de Covid-19, tener antojos, querer salir a caminar, visitar a tus seres queridos y no poder hacerlo. 

Actualmente, la actriz mexicana África Zavala está en la mitad de su embarazo, y Claudia Cervantes se convirtió en madre el pasado 26 de marzo, justo cuando la condición de la pandemia comenzó a empeorar en México. Ambas compartieron a El Universal cómo han mantenido la fuerza y la esperanza en tiempos de oscuridad.

“Ya no sé ni cuántos días llevo encerrada”

“Me ha tocado algo que no pensé que me pudiera pasar, pero estoy tratando de ponerle todas las ganas del mundo, de ser muy positiva, de cuidarme todo lo que puedo, ya no sé ni cuántos días llevo encerrada pero creo que no podemos hacer otra cosa, así que a buscarle el lado positivo, y más porque siempre lo he dicho: el bebito es todo lo que es la mamá, así que a tratar de no estresarme, porque ahorita ves las noticias y te estresas, y si ya de por sí las hormonas te vuelven loca, ¡imagínate!, trato de distraerme, hago yoga prenatal y varias cosas”, dijo África.

En cuanto al momento de alumbramiento, dijo que en el hospital hacen pruebas de Covid-19 a las mamás y a los que van a estar en el parto, para verificar que se encuentren sanos, y que además, hay zonas específicas para mujeres embarazadas.

Así, con un aumento en la seguridad, ella se siente más tranquila, y también porque espera, el bebé no se adelante.

“Estamos en la mitad del embarazo, ojalá que nos toque el parto cuando ya vayamos saliendo de esto, también el estar separada de todo el mundo es difícil, estamos los dos solitos con el bebecito sin saber nada”, agregó.

Afortunadamente, este tiempo lo ha pasado con su pareja, León Peraza, pero le ha resultado muy complicado estar lejos de su mamá y más porque dice, tiene mamitis, pero lo bueno es que puede platicar con ella a través de videollamadas todas las veces que quiera. Lo otro es la cantidad de antojos que se tienen durante el embarazo y que resulta difícil satisfacer con todo cerrado.

“Esa es una parte muy fea porque, si estuviera en la calle, andaría comiendo de todo, y ahorita no se puede porque no podemos salir, por los antojos la verdad sí sufrimos un poco”.


La pareja ha decidido tomar videos para que su hijo los vea cuando sea más grande, y sepa qué estaba pasando en el mundo mientras él se preparaba para nacer. 

“Todos los días, León le lee un libro, ‘El principito’, yo trato de cantarle, de platicar, y ya le ha tocado a León que le dé unas cuantas pataditas en la nariz, se acerca, le habla y él se mueve, eso es muy bonito,  el bebito le reconoce la voz, le pongo a mi mamá por videollamadas, para que también escuche su voz”, dijo África, quien, como muchas mamás que hoy esperan el nacimiento de sus hijos, se mantiene más firme que nunca, protegiendo a su bebé de todo, y tratando de que, aunque el mundo sea un caos, aunque le haya tocado el día más difícil de la pandemia, establecido este 8 de mayo, su bebé se sienta seguro y feliz en su vientre, con las voces de sus padres, de sus abuelos, dándole ánimos.

“A mi bebé le tocó nacer en esta nueva era para dar esperanza”

La actriz Claudia Cervantes dio a luz a Santiago el pasado 26 de marzo.

Ese día, el país tenía 585 casos positivos de coronavirus y las defunciones no llegaban a diez. Su hijo, dice la actriz y productora, fue un guerrero desde el principio, desde que sobrevivió como embrión para su tratamiento in vitro. 

“Resistió estar a menos 196 grados, congelado, hasta la transferencia. Después, le tocó nacer en esta nueva era para dar esperanza. Él es tierra fértil de cómo debe ser la humanidad”, compartió.

Ella describe su embarazo como algo muy bello, y todo porque se alejó de lo que pudiera ser tóxico, comió bien, durmió bien y estuvo trabajando, pero todo en completa armonía.  incluso, cuando Santiago nació, llegó a extrañar su pancita.

“No tuve miedo porque me preparé con mucha anticipación con el proceso in vitro que tuve, así que estaba emocionalmente, espiritualmente y físicamente lista, lo que sí pensaba era que mi bebé era como un huevito Kinder sorpresa, que cuando lo viera sabría cómo era, y como el papá es un donador anónimo, no conocía sus características físicas y eso me causaba ilusión, aunque había personas que me decían “¿y si te sale chino?”, pero yo siempre dije que fuera como fuera lo amaría y que eso era más bien un asunto racista, y yo no lo soy”.

En cuanto al día del parto, tuvo que tomar precauciones extras por la pandemia.

“Sabía que en plena pandemia, si iba a un hospital, los riesgos de contagio podían ser mayores, o quizá con precaución menores, y entonces lo consulté con mi intuición, con mi conciencia y tomé la decisión de ir a la clínica, todos los doctores que estuvieron conmigo, el doctor Luján y todos tenían las medidas sanitarias necesarias”.

Una de sus fortalezas a la hora del alumbramiento fue estar con su doula, una mujer que ya ha sido madre y que acompaña a otras mujeres durante todo el proceso de embarazo y le da fortaleza.

“Mi doula me acompañó desde que se rompió la fuente, vino a casa en la madrugada, fueron 12 horas de contracciones que eran tan intensas que al final sí pedí el analgésico, porque no dilataba, entonces, antes de la cesárea tuvimos que hacer unas posturas más y esperamos a que se relajara el piso pélvico, no fue tan suave como yo esperaba, pero cuando escuché a mi bebé llorar y la doula le cortó el cordón, -porque no podía tener ningún acompañante, ni mi mamá ni nadie-, le dediqué unas palabras. Como ya no tenía líquido amniótico tuvieron que ponerle oxígeno, pero cuando lo pusieron en mis brazos se me olvidó que dolía y todo fue amor, me sentía hipnotizada, como en éxtasis, en otro planeta, sólo sentía amor, amor, amor, no me importaba nada más”.

Unas horas después, Claudia pudo volver a casa y fue así como inció el encierro acompañada de su madre, y desde entonces no han salido para nada, cuenta que no ha tenido una sola visita y que el 10 de mayo le gustaría estar con su papá, que también cumple años, pero es imposible.

Desafortunadamente él no ha podido conocer a su nieta en persona.  

“A 39 días que nació Santiago, estoy a un día de acabar mi cuarentena personal pero continúo con la cuarentena mundial. Ya pude establecer mi rutina y horarios, saber a qué hora bañarlo, dormirlo y darle de comer. A veces el cansancio es pesado pero soy muy productiva. Gracias a Dios la leche es gratis, el bebé crece sano con ella y tengo a mi mami aquí conmigo, que se vino de Morelia a ayudarme. Yo creía que iba a recurrir a mis Nanis, ya que tengo mi empresa de niñeras, pero el regalo detrás de esta pandemia es la convivencia diaria con mi mamá y el amor que le da a mi bebé”.
 

Esperan a su bebé en cuarentena

Katy Perry y Orlando Bloom  

Katy Perry y Orlando Bloom están viviendo su embarazo en plena cuarentena, por lo que la pareja se ha mantenido unida. El pasado 3 de abril, Katy compartió una foto de Orlando anunciando el sexo de su bebé: niña. También ha compartido algunas imágenes del crecimiento de su vientre, así como parte del atuendo que habría usado en la gala del MET 2020.
 


Hanna, de Ha*Ash

Hanna, del dueto Ha*Ash, ya se encuentra en la recta final de su embarazo, y hasta ahora no ha anunciado el nacimiento de su bebé, pero sí ha compartido algunas imágenes de su pancita con sus seguidores, y hasta ha hecho videos de cocina con su hermana durante la cuarentena.


Sherlyn
Sherlyn es otra de las actrices que se encuentran en las últimas  de su embarazo. Ella se ha mantenido muy activa en redes sociales, donde anunció que su bebé es hombre, y de entrada, ya lo llama “príncipe azul”.

Hilaria Baldwin
El pasado 6 de abril, la escritora Hilaria Baldwin, esposa de Alec Baldwin, anunció que estaba embarazada, después de haber sufrido un aborto. Desde entonces, la pareja ha compartido imágenes de su embarazo durante la cuarentena, junto a sus otros cuatro hijos.

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