Redacción
El vocero del presidente de Rusia, Vladimir Putin, ha sido hospitalizado con coronavirus.
El propio vocero, Dmitry Peskov, dijo a la agencia noticiosa Interfax el martes que “sí, estoy enfermo. Estoy recibiendo tratamiento”.
Peskov, de 52 años, inició su colaboración con el presidente a principios del 2000 y es su vocero desde 2008.
Los rusos que presentan síntomas leves o son asintomáticos pueden permanecer en sus casas y no estaba claro de inmediato si la hospitalización de Peskov refleja la gravedad de su estado o si se trata de una precaución adicional.
Los periodistas acreditados en el Kremlin dijeron por Twitter que Peskov apareció por última vez en público el 30 de abril “en una reunión con Vladimir Putin”. No estaba claro si los dos se encontraban en la misma sala, ya que desde hace algunas semanas Putin realiza todas sus reuniones por teleconferencia.
Desde el comienzo de la pandemia, el presidente ruso redujo al mínimo sus reuniones y optó por las llamadas diarias a sus ministros y colaboradores.
El lunes, Putin dijo que Rusia estaba desacelerando las infecciones y anunció la mitigación de algunas medidas de la cuarentena nacional.
Para el martes Rusia había reportado más de 232.000 casos confirmados. El lunes, horas antes de que Putin hiciera declaraciones por televisión sobre el levantamiento de la cuarentena económica parcial, las autoridades de salud informaron que había más de 11 mil 600 casos nuevos, un récord para el día.
El primer ministro Mikhail Mishustin reveló el 30 de abril que había dado positivo y se declaraba en cuarentena. Putin le pidió que lo llamara después de que le dieran el alta en un hospital.
Rusia inicia este martes un prudente desconfinamiento regionalizado, amparado por una débil mortalidad aunque el país volvió a registrar de nuevo más de 10 mil casos de contaminaciones suplementarias por el nuevo coronavirus.
Con 232 mil 243 casos confirmados desde el inicio de la epidemia, de ellos 10 mil 899 registrados el martes según las estadísticas oficiales, Rusia está entre los tres o cuatro países más afectados del mundo en cantidad de enfermos.
