Redacción
Los avances del Programa Nacional de Reconstrucción resultan insuficientes para la atención total de infraestructuras de vivienda, física, educativa, de salud y de bienes históricos, artísticos y culturales, debido a los recortes presupuestarios, advirtió el Consejo Nacional de Evaluación de la Política de Desarrollo Social (Coneval).
Al presentar la Evaluación de Diseño con Trabajo de Campo 2019-2020 de ese programa, detalló que el ajuste al gasto de 2020 afectará la planeación, sobre todo, en las metas del programa, porque reducirá su alcance.
En su opinión, es necesario buscar alternativas en la asignación y la ejecución de recursos, de manera que la normatividad asociada a su ejercicio sea anual, para que no siga siendo una limitante para las acciones de reconstrucción.
Durante 2019, el programa contó con un presupuesto asignado de 8 mil millones de pesos, con los cuales se otorgaron 36 mil 495 apoyos de vivienda, 296 de rehabilitación, reconstrucción y equipamiento de planteles educativos; se restablecieron 81 inmuebles de salud y, aunque no se intervinieron los inmuebles correspondientes al sector cultura, se formalizaron 206 convenios para la transferencia de recursos a dicho sector.
Para 2020, el presupuesto asignado al programa fue 62% menor respecto a 2019, con 2 mil 844 millones de pesos, lo que pone en riesgo el avance en la reconstrucción de localidades que no han sido atendidas por completo.
El presupuesto del programa en el sector educativo es el más afectado, debido a la extinción del Instituto Nacional de la Infraestructura Física Educativa (Inifed), formalizada a través de la entrada en vigor de la Ley General de Educación y la abrogación de la Ley General de la Infraestructura Física Educativa, a partir del 28 de septiembre de 2019. No obstante, el instituto continúa laborando para concluir sus asuntos pendientes.
Adicionalmente, se aconseja que los mecanismos de coordinación interinstitucional implementados por el programa deben enfocarse en la atención del problema de forma integral y organizada por todos los sectores involucrados en resolver el problema.
El Coneval reconoce que una fortaleza del programa es la experiencia de los funcionarios y del personal operativo, derivada de su participación previa en varias instituciones, lo que les ha permitido utilizar su conocimiento.
