Enid Mendoza
Este lunes, Daniela Muñoz cumple un año de desaparecida, mientras tanto, sus padres han sido víctimas de pesadillas, insomnio y otros malestares generados por la incertidumbre que hay en el caso, además que la anterior administración estatal y la Procuraduría General de Justicia del Estado (PGJE) han sido negligentes en el caso.
En una entrevista hecha por el Periódico de Tlaxcala la madre y al padre de Daniela Muñoz Muñoz, maestra desaparecida el 13 de septiembre del 2020, narró cómo ha sido este proceso para ellos y las negligencias en el caso.
El padre de Daniela dijo que Álvaro Daniel ha tenido 4 audiencias en las que se reserva su derecho de hablar.
“Cómo es posible que el victimario tenga más derechos que la víctima, él aunque está encerrado, tiene alimentos, techo, vestido y de su hija no saben qué es lo que está sucediendo con ella, si es que tendrá techo, que comer y si no estará pasando por alguna enfermedad” debido a esto sufre de una angustia y desesperación.
A partir de la siguiente semana el padre de Daniela tendrá ayuda psicológica, ya que para el son noches de incertidumbre, no puede dormir, aunque toma antidepresivos, muchas veces no le hacen efecto, despierta a las 2 o 3 am, se pone a cocinar, hacer el aseo o cualquier otra cosa porque estar en la cama no es algo que soporte.
Debido a que regresamos a clases presenciales, se levanta a las 5:00 am para llegar a su trabajo, posteriormente llegar a las 10:00 pm, de ahí esperar a que den las 12 de la noche porque no logra conciliar el sueño por estar pensando en que estará pasando con su hija, ya que tenía mucho acercamiento con ella.
“Daniela era una persona independiente, ya tenía un año y medio trabajando como maestra por parte del Estado de Puebla, iba de lunes a viernes”
Ella no necesitaba dinero, ni que alguien la mantuviera, su hija quería vivir sola, superarse y después tener hijos.
El día lunes antes de desaparecer, Daniela tenía que trasladarse a la ciudad de Puebla porque le iba a dar su nombramiento definitivo como maestra.
Mientras tanto la madre de Daniela, Rosa María Muñoz dijo que “puede decir lo que ha sido para ella, pero desgraciadamente nadie lo siente como ella, que quisiera que estuvieran 20 minutos en sus zapatos, porque desgraciadamente existe mucha gente indiferente y que ella no le desea nada de lo que está viviendo a alguien más”
Pidió a la señora Efigenia, madre de Álvaro Daniel N, que se ponga en sus zapatos porque le arrancaron un pedazo de su corazón, así como del de su hija, porque ella está separada de sus seres queridos y está sufriendo, dijo entre lágrimas.
