El gobierno de Costa Rica anunció ayer que se dispone a “enmendar” un error que se prolongó por ocho años y que, para reafirmar su vocación de apertura comercial, reactivará los trámites internacionales para sumarse a la Alianza del Pacífico, creada en 2011 por México, Colombia, Chile y Perú y consolidado como uno de los principales foros políticos y económicos de América Latina y el Caribe.

Aunque en su gestión, de 2010 a 2014, la entonces presidenta de Costa Rica, Laura Chinchilla, inició las negociaciones con los cuatro países para incorporarse a la Alianza, sus sucesores—Luis Guillermo Solís, de 2014 a 2018, y Carlos Alvarado, de 2018 a 2022—las paralizaron, por lo que esta nación quedó rezagada.

En febrero de 2014 y en vísperas de finalizar su cuatrienio en mayo de ese año, Chinchilla firmó en Colombia los protocolos para que Costa Rica empezara el proceso como miembro pleno de la Alianza, ya que el rango de observador lo obtuvo en 2012. No obstante, Solís y Alvarado se abstuvieron de continuar con los trabajos.

“Hay que enmendar este error”, dijo ayer el ministro de Comercio Exterior de Costa Rica, Manuel Tovar, al anunciar la decisión en Canal 7, principal medio televisivo privado de esta capital.

Al recordar que, con unos 231 millones de habitantes, la Alianza representa el 2.2% del Producto Interno Bruto (PIB) del mundo, Tovar explicó que Costa Rica deberá avanzar sin más demoras para poder insertarse “a este importante” bloque.