Feggy Ostrosky, licenciada en Psicología, Maestra en Trastornos de la Comunicación por la Universidad de Northwestern y Doctora en Biomedicina por la Universidad Nacional Autónoma de México (UNAM) de esta misma institución, ha analizado a varios psicópatas a lo largo de su carrera pero ninguno como Andrés Filomeno Mendoza Celis: “él logra engañarte, no pareciera que pudiera hacer daño, te mira a los ojos y hasta parece tímido”.
Esta semana se transmitió en televisión nacional la serie documental Caníbal, Indignación total, que produjo la Suprema Corte de Justicia de la Nación y que aborda el tema de los feminicidios en México a través del caso puntual del feminicida de Atizapán cuya intención es poder crear una mayor conciencia sobre la situación de violencia de género en el país, por lo cual invitaron a Ostrosky a analizar a este hombre que ha matado a más que cualquier otro asesino en México.
Andrés de 73 años tiene una estatura baja pero un cuerpo fornido, su mirada es apacible, mira a los ojos y es cordial, pero esta es sólo la cara que muestra a los demás y que logró engañar a cientos de personas, vecinos y autoridades, decenas de mujeres lograron descubrir su otra cara, la de asesino serial y feminicida, pero fue lo último que vieron porque las mató.
Ostrosky quien también ha escrito libros como Mentes asesinas: La violencia en tu cerebro y Mentes criminales ¿Eligen el mal?, estuvo frente a él por seis horas para analizar su mente y saber cómo y porqué logró cometer sus aberrantes actos en total impunidad por más de 30 años
Se han determinado hasta el momento 19 mujeres asesinadas, sin embargo en su registro de nombres de víctimas él anotó 29, aún falta identificar con pruebas genéticas los 4,300 restos de huesos hallados enterrados en su casa principal, aún no se han hecho excavaciones en otros dos predios que pertenecían a él y su familia.
— ¿Pudo ver usted las grabaciones que realizó de sus crímenes?
—Sí, vi todo. Él no aceptó cometer canibalismo pero yo lo vi, lo vi en sus grabaciones, él se filmaba y había indicios en toda la escena de los crímenes en su casa, incluso aparece desnudo en algunas grabaciones mientras está destazando a sus víctimas.