Natalie Portman tuvo que transformar su esbelta figura para encarnar a la nueva Jane Foster, así que su cuerpo cambió para darle realismo al personaje que acompaña a Chris Hemsworth en la cinta “Thor: Love and Thunder”.

Portman pasa de astrofísica y novia de Thor a ser la superheroína Mighty Thor en la versión más surrealista de Marvel; ni siquiera la propia Natalie Portman esperaba volver a encarnarla cuando en 2016 aseguraba que su trabajo en la franquicia “había terminado”.

Para la nueva película, Waititi ha transformado a Foster en Mighty Thor, quien apareció en los cómics originales hace más de 50 años como una versión femenina de Thor que comparte sus poderes y se apropia de su famoso martillo.

Así, el periplo de Thor deviene en una comedia romántica con guiños ochenteros, cargada de ironía y a ritmo de heavy metal en la que la pareja y el resto de acompañantes deben arreglar sus diferencias mientras combaten a Gorr un villano conocido como el Carnicero de los Dioses, dispuesto a no dejar ni una deidad viva en el mundo. La actriz de 41 años tuvo que someterse a un entrenamiento de 10 meses antes de la filmación y durante ésta, para poder lucir unos brazos fuertes y ejercitados que se podrán ver en la cinta que estrena mañana, sin embargo, su aspecto causó conmoción entre sus fans desde que meses atrás se filtraron fotografías de su figura.

La actriz tomó esta etapa como un aprendizaje en donde los que más disfrutaron verla poderosa, en acción y con capa fueron sus hijos, así lo relató a la revista Variety.

“Mi hijo de 5 años y mi hijo de 10 años estaban tan cautivados por este proceso, pudieron visitar el set y verme vestida con una capa. Sabes, es muy raro que mis hijos digan: ‘¡Por favor, ve a trabajar!’ Por lo general, es todo lo contrario”, expresó.