Alonso Camarillo / Local
De acuerdo con la segunda edición del reporte “Levantemos la Voz de las Fiscalías Anticorrupción”, elaborado por el Instituto Mexicano para la Competitividad (IMCO), la Fiscalía Especializada en Combate a la Corrupción de Tlaxcala (FECC), empeoró en diversos temas como el de la dotación de recursos para el desarrollo de sus actividades en la vigilancia de la corrupción en la entidad.
El reporte señala que la Fiscalía Anticorrupción de Tlaxcala carece de: autonomía, reglamento interno, manual de procedimientos, protocolos de investigación, protocolos de audiencias; así como de protocolos de protección a testigos, de entregas vigiladas, de operaciones encubiertas e incluso de protocolos de corrupción al interior de la propia fiscalía además de acuerdos.
A diferencia de que sí cumple con fundamentos legales, un catálogo de delitos de corrupción, una ley orgánica y un organigrama; no obstante, posiciona a la entidad entre los 13 estados con niveles deficientes en el cumplimiento de un eje de recursos.
Cabe señalar que este 2022 la fiscalía anticorrupción percibió 10 millones 766 mil 609 pesos que representan hasta 4.5 por ciento menos de recursos menos que en 2021 cuando recibió 11 millones 272 mil 891 pesos, a diferencia de Sonora que recibió 4.1 por ciento más que el año anterior; en otro extremo está la fiscalía de San Luis Potosí con 87.4 por ciento menos que lo asignado en 2021.
En materia de capital humano, Tlaxcala se encuentra entre las entidades con un nivel de cumplimiento regular, destacando que no todos los peritos tienen licenciatura, ni todos los oficiales ministeriales cuentan con estudios a nivel bachillerato; tampoco todos los peritos ni oficiales ministeriales recibieron capacitaciones.
Del mismo modo, a pesar de que en 2022 fueron iniciadas 559 investigaciones, de estas 143 fueron investigaciones determinadas, ocho se fueron por archivo temporal, 126 fueron judicializadas, así como hubo 24 vinculaciones a proceso; no obstante, no se presentaron sentencias condenatorias.
