Guerra de encuestas

Por Elena Sánchez Sánchez

Periódicamente casas encuestadoras presentan cifras para dar a conocer a los lectores quién es el alcalde mejor evaluado, entre otros estudios. Estos ejercicios desatan una serie de situaciones, para ver quién es el mejor situado.

Apoyados por diversos medios de comunicación los “alcaldes mejores posicionados” dan a conocer sus resultados, con notas y columnas pagadas que son difundidas en algunos portales de información, pero tristemente para ellos, los ciudadanos no creen las cifras que ahí se presentan.

Y es que los presidentes municipales pueden decir que el 80 o 90 por ciento de los ciudadanos los califican bien, pero basta observar sus calles, -muchas de ellas repletas de basura y baches- para saber que su trabajo es deficiente y que los servicios públicos que ofrecen a los ciudadanos.

Para evaluar de forma correcta a un alcalde se deben tomar ciertos indicadores que muchas de las veces los ciudadanos desconocen, entre ellos se encuentran gestión de resultados, cumplimientos de agenda desde lo local, desarrollo integral del municipio, indicadores competitivos y cooperativos, y atención ciudadana.

Pero penosamente los ciudadanos no podemos acceder a diversa información para saber si nuestro alcalde hace lo correcto; si el presupuesto se aplica de forma correcta para cubrir las necesidades de los pobladores, o si las obras que realizaron de verdad se construyeron con calidad.

Habrá que preguntarse si los trabajos que realizan los alcaldes contribuyen al desarrollo regional y con ello a la mejora de la economía de los habitantes. No lo creemos, puesto que, si no pueden limpiar los lotes baldíos o tapar las decenas de baches en sus calles, menos diseñarán políticas públicas en beneficio de la sociedad.

En nuestro país, se promueven distintos esfuerzos para incorporar la cultura de medición de desempeño en el ámbito local apegada a la realidad. Estos van enfocados a construir indicadores y bases de datos que permitan analizar el trabajo de cada presidente municipal para mejorar la capacidad y el desempeño de los municipios.

Así que cada vez que un alcalde es el favorito de los ciudadanos, piense que no solo porque le cae bien, o que ya pavimentó su calle quiere decir que el presidente municipal realiza un excelente trabajo.