J. Molina

En recientes declaraciones, Antonio Ramírez Hernández, titular de la Secretaría de Medio Ambiente (SMA), detalló que los altos costos en funcionamiento de plantas tratadoras de aguas residuales y el mantenimiento de las mismas, provocó que muchas de dichas estructuras se mantengan sin operar en la entidad.

En Tlaxcala, son cerca de 170 plantas las que están instaladas, nueve de ellas están bajo control del Gobierno del estado y el resto a cargo de los municipios.

En ese sentido, el secretario aseveró que el 80 por ciento de las plantas que están a disposición de los municipios no están siendo operadas, por insuficiencia presupuestal o por robos o precariedad en cuanto a infraestructura.

Por ello, adelantó que el Gobierno del estado, por medio de la Comisión Estatal de Agua y Saneamiento, se ofrece la posibilidad a los alcaldes de que la dependencia gubernamental se haga cargo de toda la carga presupuestal, operación y mantenimiento.

Finalmente, insistió en que dicha estrategia de transición sobre el control de las plantadoras de agua, pretende hacer que aumenten el número de sistemas funcionando de manera efectiva.

“… Tener la oportunidad de que la operación se haga al 100 por ciento bajo la infraestructura, la capacitación y el mecanismo dorado por parte del Gobierno estatal, además que el financiamiento vendría propiamente dé”, aseveró.